Canciller paraguayo descarta que Paraguay pueda ser "sancionado" por vecino
En rueda de prensa con medios extranjeros, Fernández incluso se mofó de la decisión anunciada ayer por el Gobierno de Argentina de que retiraba a su embajador en Paraguay, Rafael Romá, "hasta que se restablezca el orden democrático" en el país.
Según dijo, aparte de no haber recibido ninguna comunicación oficial al respecto, Romá terminó su misión hace tres meses y ya había un encargado de misión al frente de la legación.
Con respecto a la llamada a consulta de los embajadores de Brasil y Uruguay, comentó que se trata de un mero procedimiento, y en particular aludió al apoyo "absoluto" de la población paraguaya de origen brasileño (los colonos "brasiguayos") al relevo de poder en Paraguay.
Fernando Lugo fue destituido el pasado viernes tras un juicio político de apenas 30 horas en el que fue considerado culpable de "mal desempeño" en sus funciones por una abrumadora mayoría en el Legislativo.
Una misión de cancilleres de la Unasur enviada a Asunción para mediar en la crisis no consiguió desacelerar el juicio de destitución, en el que pedía a los parlamentarios que respetaran el "debido proceso" para que Lugo tuviera tiempo de articular una defensa.
Lugo aceptó enseguida la decisión del Legislativo, que esta madrugada, en una primera salida a una concentración de seguidores frente a la televisión pública, calificó de "golpe de Estado parlamentario", al tiempo que observó la respuesta que ha tenido de los vecinos del Mercosur.
"Podemos coincidir en que fue rápido el proceso" en el Congreso, pero "quién soy yo para dar norma a los parlamentarios", se cuestionó el nuevo canciller.
Fernández, nombrado por el nuevo presidente, Federico Franco, aseguró que su Cancillería está en "conversación permanente con cancilleres de varios países" y que "algunos países están más de acuerdo (y) otros menos con la situación".
Aludió al apoyo de Canadá y, en particular, agradeció el comunicado emitido por España, que ayer dijo haber "tomado nota" de la decisión de Lugo de acatar su destitución y confió en que Paraguay "logre encauzar la actual crisis política" y "salvaguardar la convivencia pacífica".
"Estamos negociando con los países" vecinos, que "tienen que entender que Paraguay no puede ser sancionado porque no ha violado ninguna norma internacional", insistió el ministro.
Fernández mantuvo que su intención hasta el momento sigue siendo asistir a la cumbre del Mercosur, la semana próxima en la ciudad argentina de Mendoza, y aseveró que ya hay allí funcionarios paraguayos para las reuniones previas.
Aludió también a informaciones según las cuales la Unasur está convocando una reunión para el próximo miércoles para tratar la posible expulsión de Paraguay tras la destitución de Fernando Lugo como presidente.
"¿Cómo la Unasur va a convocar a una reunión si Paraguay tiene la Presidencia" temporal del bloque sudamericano, preguntó.