Con bloqueos de rutas y protestas cerca de cinco mil integrantes de  comunidades campesinas mantienen  un paro indefinido en la región de Cajamarca, en el norte de Perú, contra el proyecto minero Conga en demanda de la suspensión de las actividades de explotación aurífera.

La protesta es organizada por el frente de Defensa Medioambiental de Cajamarca, que retomó la primera huelga de noviembre pasado con la demanda  del retiro del proyecto, bajo la acusación de que afectaría  las fuentes de agua de Cajamarca, unos 850 km al norte de Lima.

Ayer,   sexto día de la huelga, el presidente regional, Gregorio Santos, rechazó al  presidente del Consejo de Ministros, Óscar Valdés, como un interlocutor válido para resolver el conflicto y exigió la presencia del presidente  Ollanta Humala para dialogar. “No hablaremos con ministros fujimoristas”, sentenció el dirigente.

Santos protagonizó ayer un encendido discurso invocando a sacar del gobierno al mandatario peruano “porque no cumple su palabra”, de la misma forma como en  Ecuador fueron destituidos de sus cargos los presidentes  Lucio Gutiérrez y Jamil Mahuad, y   Gonzalo Sánchez de Lozada en Perú .

También pidió la liberación del alcalde de Espinar, Óscar Mollohuanca, quien permanece detenido por la utilización  irregular de recursos del Estado en protestas antimineras.

La semana anterior Ollanta  acusó a los dirigentes del paro  de actuar sin intención alguna de diálogo y dijo que el Gobierno no caerá en esas “provocaciones”.

“Hay gente que está buscando una lucha política. No es un tema de agua, porque hay agua en Cajamarca, lo que hay que hacer es represarla y administrarla, eso ha debido hacerlo el Gobierno Regional, pero no lo hizo”, dijo Humala.

En abril pasado, el mandatario peruano aprobó el proyecto Conga bajo una serie de condiciones, entre las que destaca la multiplicación de las reservas de agua, establecer un fondo social y generar al menos 10.000   puestos de trabajo directos.

El proyecto Conga está a cargo de la empresa Yanacocha, propiedad de la estadounidense Newmont y la peruana Buenaventura, es la mayor productora de oro de Suramérica, que planea vaciar cuatro lagunas de la región  para extraer cobre y oro en las zonas altas de Cajamarca.

El presidente del Frente de Defensa de Cajamarca, Ydelso Hernández, uno de los grupos promotores del paro, afirmó que mantendrán su protesta contra el proyecto Conga,  que demanda una inversión de 4.800 millones de dólares,  porque está demostrado técnica y legalmente que no es viable, pues afectará el abastecimiento de agua.

Un peritaje realizado este año al estudio de impacto ambiental del proyecto Conga recomendó a Yanacocha una serie de modificaciones que incluyó la sugerencia de que se evite el vaciado de al menos dos de las cuatro lagunas que pretende utilizar para la explotación de oro.

Yanacocha aún no ha respondido si acatará las recomendaciones del peritaje para seguir adelante con el proyecto y su decisión se espera para mediados de junio.

Congresistas rompen alianza

La protesta contra el proyecto minero fue trasladado ayer al Parlamento, en el que tres congresistas que renunciaron a la alianza gobernante Gana Perú acusaron al presidente Ollanta Humala de abandonar sus promesas electorales y de favorecer a los grupos empresariales, en una ruptura definitiva de la izquierda con el oficialismo.

“El gobierno ha faltado a su palabra y a sus compromisos electorales y se ha subordinado a los grandes grupos de poder económicos”, indicó ayer  el legislador Javier Diez Canseco, uno de los renunciantes.

El lunes, Diez Canseco y Rosa Mavila, los últimos dos legisladores de izquierda que aún formaban parte de Gana Perú, habían roto con la alianza de gobierno.

El alejamiento de ambos del oficialismo seprodujo luego de la renuncia de  la legisladora Verónica Mendoza, que formó parte del núcleo fundador del Partido Nacionalista del presidente Humala, tronco principal de Gana Perú.
Los legisladores se solidarizaron con las huelgas que se cumplen en la provincia de Espinar y en Cajamarca contra los proyectos mineros.