El líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro, y el Papa Benedicto XVI dialogaron este miércoles en La Habana, poco después de una misa oficiada por el Sumo Pontífice ante cientos de miles de personas.

El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, indicó que el encuentro de unos 30 minutos, desarrollado en la Nunciatura Apostólica de la capital cubana, transcurrió con mucha cordialidad.

Explicó que conversaron sobre el actual escenario mundial, así como en torno a temas de ciencia, cultura y ecología. También abordaron la liturgia de la Iglesia y sus cambios en las últimas décadas, agregó.

Según Lombardi, el comandante tenía mucho interés en conocer el pensamiento de Ratzinger sobre diferentes aspectos y le hizo numerosas preguntas.

Así, la primera fue sobre el cambio de la liturgia de la Iglesia Católica y el Papa le explicó a Castro la puesta al día de la misma para afrontar los nuevos tiempos de evangelización.

También le preguntó "¿Qué hace un Papa?, ¿cuál es su función?. Benedicto XVI le expresó el sentido de sus viajes por el mundo para confirmar en la fe a los cristianos, así como el servicio de la iglesia a los pueblos.

Fidel Castro se interesó por su opinión sobre las dificultades que afronta el mundo actualmente, la multiplicidad de religiones o la problemática de la ciencia que no logra dar respuesta a todos los problemas de la humanidad.

El Papa habló de la dificultad que encuentran los hombres en las sociedades en las que Dios está ausente, así como de la relación entre fe y razón y de libertad y responsabilidad.

En su encuentro, Fidel Castro pidió al Pontífice que le envíe algunos libros sobre esos temas que tanto le interesan. 

Según Lombardi, Benedicto XVI mencionó su alegría por estar en Cuba y expresó gratitud por la acogida.

Pero también hubo espacio para las bromas. En un momento del coloquio, Castro bromeó sobre las edades de ambos. El Papa tiene casi 85 años y él es un año mayor.

El Sumo Pontífice, sonriendo, le dijo: "sí, soy un anciano, pero todavía sigo haciendo mi deber".

El ex mandatario cubano ya había adelantado el martes de que hoy "gustosamente" saludaría al Papa Ratzinger, al que considera "una buena persona" y según le dijo hace varios años al actual secretario de Estado vaticano, el cardenal Tarcisio Bertone, cuando éste le visitó en la isla, tiene "la cara de un ángel".

Fidel Castro acudió a la nunciatura acompañado de su esposa, Dalia Soto, y dos de sus hijos, que también saludaron al Papa y después posaron para los fotógrafos.

La reunión tuvo lugar catorce años después de que el líder de la Revolución Cubana, que entonces era presidente de su país, se entrevistase con Juan Pablo II durante la histórica visita que realizó a Cuba.

Benedicto XVI regresará esta tarde a Roma, luego de cumplir una intensa agenda en la isla.