Basílica de San Pedro abrió sus puertas con estrictas medidas de bioseguridad
Con una misa por el centenario del nacimiento de Juan Pablo II, el papa Francisco reabrió hoy al público la Basílica de San Pedro tras más de dos meses de cierre por la pandemia de coronavirus.
"Era un hombre cercano a la gente y recorrió el mundo buscando a su gente", recordó el pontífice a su antecesor polaco, al celebrar la misa matutina desde el altar que contiene los restos de Karol Wojtila, el Papa número 264 de la Iglesia entre 1978 y su muerte en 2005.
#Ahora | en la Basílica de #SanPedro en #ElVaticano en los 100 años del nacimiento de #KarolWojtyla pic.twitter.com/SiuKd2U5Vv
— RAMIRO ESCOTO (@Ramiro_Escoto) May 18, 2020
"También era un hombre que quería justicia: justicia social, justicia del pueblo, la justicia que caza las guerras, pero justicia plena y para ello hablaba de la misericordia: porque no hay justicia sin misericordia, van juntas", agregó Jorge Bergoglio, quien proclamó Santo Juan Pablo II en 2014.
Con estrictas medidas de seguridad, que incluyen el distanciamiento social de un metro y el uso obligatorio de mascarillas, San Pedro retomó así las celebraciones tras más 71 días de cierre por las medidas dispuestas en Italia y en el Vaticano ante la difusión del coronavirus.
En los ingresos, personal sanitario con termoescáneres tomaba la temperatura de los visitantes para evitar la entrada de los que tengan más de 37.5 grados.
Además, se dispuso un nuevo sistema de ingreso y salida de la Basílica, que evita las habituales largas filas sobre la Plaza San Pedro, al tiempo que la guardia Suiza del Vaticano y los voluntarios de la Orden de Malta son los encargados de regular los accesos.
Volvió a abrir también Basílica de San Pedro, por supuesto hay que respetar medidas de seguridad anti-#coronavirus: 2 metros de distancia en el #Vaticano pic.twitter.com/zmi3lmHKzA
— Elisabetta Piqué (@bettapique) May 18, 2020
La apertura se dio luego de los trabajos de sanitización que llevó a cabo el Vaticano con soluciones de hipoclorito buscando de todos modos evitar dañar las obras de arte presentes en la Basílica constuida en el siglo XVI y que alberga, entre otras, a "La Piedad", de Miguel Ángel.
La de este lunes fue además la última de las misas matutinas celebradas por Francisco y transmitidas en directo por los canales de streaming del Vaticano, que comenzaron el 9 de marzo pasado, tras la suspensión de las celebraciones a causa de la pandemia de la vovid-19.
En el resto de las Iglesias de Italia iniciaron las misas con público, con capacidad máxima de 200 personas y la prohibición de los coros durante las celebraciones, entre otras medidas de seguridad. (I)