Autoridades de Nueva York buscan que convictos se sometan a pruebas ADN
Un proyecto de ley presentado en el Senado de Nueva York que propone que todos los convictos, sea por un delito grave o menor, tengan que someterse a pruebas de ADN fue respaldado este lunes con una manifestación en la capital estatal en la que se pidió la aprobación de la iniciativa.
Desde el 1 de enero de 1996, los convictos por delitos graves en Nueva York, entre ellos asesinato y violación, están obligados a someterse a la prueba de ADN, que al principio se obtenía de una muestra de sangre y más recientemente se recoge con un hisopo del interior de la mejilla.
El proyecto de ley, de la autoría del fiscal de Manhattan Cyrus Vance y presentado ahora en el Senado estatal por el republicano Stephen Saland, busca ampliar el Banco de Datos de ADN de Nueva York, para lo que ha propuesto que todos los convictos por delitos menores de drogas y armas también tengan que someterse a la prueba.
La propuesta cuenta con el apoyo de la Asociación de Fiscales de condados, activistas y diversas organizaciones como la Safe Horizon, que provee asistencia, alojamiento y defensa a más de 250.000 víctimas de crímenes.
También es respaldado por la Fundación Mariska Hargitay Joyful Heart, que lleva el nombre de la actriz de la serie Law & Order, apoya a víctimas de asalto sexual, violencia doméstica y abuso infantil y cuyos miembros se unieron hoy a la manifestación en Albany para pedir al Senado que apruebe el proyecto.
La medida, con la que están de acuerdo el gobernador Andrew Cuomo y el fiscal general Eric Schneiderman, aún no ha sido presentada en la Asamblea estatal.
"Es imposible no estar consciente de la importancia de la expansión del Banco de Datos de ADN, lo que contribuirá a mantener a depredadores fuera de las calles, prevenir crímenes violentos y traer justicia a las víctimas", aseguró el fiscal Vance, quien espera que con la medida, unos 43 casos, de miles pendientes, puedan resolverse en su condado.
Jessica Reyes, a quien en 2004, cuando tenía 15 años, un hombre intentó violarla y asesinarla al entrar al edificio donde vivía en el bajo Manhattan, figura entre las voces que piden al Senado que de luz verde a la medida.
Una prueba de ADN pudo vincular en 2010 a Curtis Tucker con ese delito. Pese a que Tucker fue convicto por otros crímenes durante esos seis años, nunca se le sometió a la prueba de ADN porque eran delitos menores, hasta que en 2010 fue apresado por un brutal ataque a un anciano.
Tucker se declaró culpable el mes pasado por el ataque a Reyes y se espera que cumpla 15 años en prisión.
Las pruebas genéticas de ADN se han convertido en un elemento fundamental en muchas investigaciones y gracias a ellas muchas personas presas por años han podido probar su inocencia
Fue precisamente una prueba de ADN que se mantuvo en el banco de datos del estado la que permitió vincular al hispano Lerio Guerrero por delitos de violación y robo cometidos hace 13 años, por lo que la fiscalía de Manhattan le presentó cargos la pasada semana.