Assange habría utilizado embajada para asuntos de otros países, según CNN
La cadena estadounidense CNN publicó una investigación en la que reveló supuestos documentos y videos en los que el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, habría mantenido una serie de reuniones en la Embajada de Ecuador en Londres para interferir en asuntos políticos de otros países, entre ellos las elecciones presidenciales en Estados Unidos de 2016.
Para el internacionalista Carlos Estarellas, del reportaje de CNN se desprenden las siguientes reflexiones: Que Assange utilizó la embajada para intervenir en la política de otros países. La falta de control del Ecuador, porque de acuerdo a las normas de asilo no podía hacer esta intromisión; y, la falta de sanción de parte del gobierno del entonces presidente Rafael Correa contra Assange.
Según la investigación de CNN, Assange pese a estar confinado en la legación diplomática ecuatoriana, mantuvo reuniones con el fin de interferir en las elecciones de Estados Unidos en 2016.
La publicación señala que entre los visitantes de la embajada habrían estado ciudadanos rusos y piratas informáticos en momentos críticos de la campaña, a menudo durante horas. Además de que poseía un ancho de banda de Internet de gran alcance.
Los supuestos documentos desarrollan la posibilidad, planteada por el fiscal especial estadounidense Robert Mueller en su informe sobre la interferencia rusa, de que varios mensajeros llevaran a dicha embajada archivos ciberpirateados sobre el Partido Demócrata y su entonces candidata Hillary Clinton.
Los supuestos documentos provendrían de informes de vigilancia compilados para el gobierno de Ecuador por la empresa privada española de seguridad UC Global, que fueron obtenidos por la cadena CNN.
“Los registros de seguridad destacan que Assange manejó personalmente algunas de las publicaciones del material “directamente desde la embajada”, donde vivió durante casi siete años. Después de la elección presidencial en la que Trump resultó victorioso, la empresa de seguridad preparó una evaluación de las lealtades de Assange. Su informe, que incluyó información de fuentes abiertas, concluyó: “No hay dudas de que existen pruebas de la vinculación entre Julian Assange y los servicios secretos rusos”, indica la investigación de CNN.
No obstante, la empresa española de seguridad UC Global hasta el momento no ha respondido las solicitudes hechas por la cadena CNN para comentar sobre el asunto.
Exclusivo: Reportes de vigilancia refuerzan la posibilidad de que varios mensajeros le hayan dado archivos hackeados a Assange en la Embajada de Ecuador. https://t.co/6vvMqslwF6
— CNN en Español (@CNNEE) July 16, 2019
Assange niega vínculos con Rusia
El fundador de WikiLeaks siempre ha negado trabajar para el Kremlin y ha insistido en que la fuente de las filtraciones que perjudicaron al Partido Demócrata “no es el Gobierno ruso y no es un ente estatal”.
En su momento Assange dijo que habría publicado información que habría comprometido al entonces candidato Donald Trump si la hubiera recibido.
EE.UU. anunció hace meses que formularía cargos penales contra Assange por su papel en las filtraciones de 2010 de cables diplomáticos secretos y bitácoras de guerra del Pentágono, que WikiLeaks obtuvo de la entonces analista de inteligencia del Ejército, Chelsea Manning.
La policía británica arrestó a Assange en abril, luego de que el Gobierno ecuatoriano le revocara el asilo político otorgado en 2012 y autorizara el ingreso de las autoridades.
Ahora cumple una pena de un año de prisión en Londres por violar las condiciones de su fianza en el Reino Unido, mientras combate vigorosamente una solicitud de EE.UU. para extraditarlo.
WikiLeaks no ha dado una versión sobre este caso pese a los pedidos de los periodistas de CNN. Los abogados de Assange se negaron a comentar. Assange mantiene su inocencia y WikiLeaks dice que los cargos son “el peor ataque a la libertad de prensa de nuestros tiempos”.
CNN tampoco ha contado con las versiones de tres exembajadores de Ecuador en Londres y solo ha recibido las declaraciones de un extitular de la legación diplomática, Juan Falconí.
Este exfuncionario le habría indicado a CNN que el Gobierno de Ecuador nunca lo presionó para que le diera tratamiento especial a Assange, y que él, como embajador, estableció las reglas que debía seguir el huésped australiano.
Otros funcionarios y exfuncionarios ecuatorianos, entre ellos el expresidente Rafael Correa y el excanciller Ricardo Patiño, no han respondieron a los pedidos de comentarios respecto de esta investigación (I).