Asesinada una activista defensora de los derechos de las mujeres en el noreste de Afganistán
La activista afgana a favor de los derechos de las mujeres Freshta Kohistani ha sido asesinada en la provincia de Kapisa, en el noreste del país, según han confirmado las autoridades, apenas un día después de la muerte de un conocido activista en un ataque en la capital, Kabul.
El Ministerio del Interior ha indicado en un comunicado que Kohistani ha sido tiroteada por "personas armadas no identificadas a bordo de una motocicleta" en el distrito de Kohistán, antes de agregar que su hermano ha resultado herido en el ataque, si bien la Policía ha indicado que el hombre también ha fallecido.
"Unidades de Inteligencia han abierto una investigación sobre el ataque", ha señalado, según ha informado la cadena de televisión afgana Tolo TV. La activista había criticado el 13 de diciembre a las fuerzas de seguridad por no garantizar su seguridad tras recibir amenazas.
"Muchas veces he pedido al Ministerio del Interior y al ministro, al jefe del Departamento contra el Crimen y al jefe de la Dirección Nacional de Seguridad que aborden las amenazas a las que hago frente, pero me han ignorado", afirmó a través de su cuenta en la red social Facebook.
Por ello, pidió a las autoridades que "se tomaran en serio" el asunto y advirtió de que "serían responsables de su sangre" en caso de que le pasara algo, antes de pedir directamenta el vicepresidente primero, Amrulá Salé, que tomara cartas en el asunto.
El asesinato de Kohistani, cuya autoría no ha sido reclamada, ha tenido lugar un día después del de Yusuf Rashid, jefe de la organización no gubernamental Foro para la Elección Libre y Justa de Afganistán, asesinado en Kabul. Apenas dos días antes había muerto el periodista Rahmatulá Nikzad en un ataque en la provincia de Ghazni (centro).
Estos asesinatos tienen lugar en medio de un repunte de la violencia en Afganistán a pesar de las conversaciones de paz entre el Gobierno y los talibán, que hasta la fecha han rechazado declarar un alto el fuego, a pesar de las peticiones de Kabul y de la comunidad internacional. (I)