Asamblea venezolana se apresta a dar a Maduro superpoderes en defensa y seguridad
El Legislativo venezolano se apresta a aprobar este domingo los superpoderes "antimperialistas" en materia de seguridad y defensa reclamados por el presidente izquierdista Nicolás Maduro para enfrentar a Estados Unidos en medio de una creciente tensión bilateral.
El mandatario pidió al Legislativo una "Ley Habilitante" para gobernar seis meses por decreto y enfrentar lo que en sus cotidianas y extensas apariciones en cadena televisiva califica de "amenaza imperialista".
La sesión legislativa coincide con dos semanas de gigantescas maniobras militares iniciadas ayer, mientras este domingo se organiza una "manifestación antimperialista" hacia el Palacio de Miraflores (sede de la presidencia) anunciada todo el fin de semana por la televisión del gobierno.
En una nueva escalada de la tensión con Estados Unidos, el presidente Barack Obama había calificado el lunes la situación en el país sudamericano de "amenaza extraordinaria e inusual a la seguridad nacional y la política exterior de Estados Unidos".
"Voy a solicitar una ley habilitante antimperialista para prepararnos para todos los escenarios y en todos ganar y en todos triunfar con la paz", replicó Maduro pocas horas después.
La ley habilitante, según el proyecto, permitirá a Maduro legislar para "la protección contra la injerencia de otros Estados en asuntos internos de la República, acciones belicistas o cualquier actividad externa o interna que pretenda violentar la paz".
Recurso constitucional
La ley habilitante es un dispositivo de la Constitución venezolana que permite al jefe de Estado gobernar por decreto en temas específicos durante un período.
Una habilitante debe ser aprobada por la mayoría especial del 60% de los diputados. Ese es el porcentaje que dispone, precisamente, el gobierno chavista, cuya bancada parlamentaria suma 99 legisladores sobre 165.
Esa mayoría permite al oficialismo, además de sancionar habilitantes, dar quórum para las sesiones, controlar la agenda parlamentaria y aprobar o rechazar todos los proyectos de ley sin necesidad de ninguna alianza con la oposición.
La última vez que el presidente solicitó superpoderes -para legislar por un año en temas económicos- fue a fines de 2013.
Bajo esa ley habilitante, Maduro sancionó unas cuatro decenas de decretos con fuerza de ley, entre ellos límites a ganancias empresariales, centralización de la distribución de alimentos e impuestos específicos a la renta y al consumo.
En ese mismo año Venezuela enfrentó una degradación económica caracterizada por un déficit fiscal de 20% del PIB, una caída de la actividad económica de 4 puntos, inflación cercana al 70% y una pertinaz penuria de alimentos y medicinas.
El difunto presidente Hugo Chávez utilizó superpoderes en cuatro ocasiones (2000, 2001, 2008 y 2010), en las que sancionó dos centenares de decretos.