El Gobierno argentino expresó el jueves 16 de julio de 2020 su rechazo a las maniobras navales, aéreas y militares por parte del Reino Unido en las Islas Malvinas, territorio usurpado a este país suramericano en 1833 y actualmente en disputa.

En un comunicado, la cancillería rechazó "en los términos más contundentes", estos ejercicios militares en el cual intervinieron el buque patrullero HMS Forth, la Compañía de infantería británica A y la aeronave A400M junto a los Typhoons de la 1435 Flight de la RAF, que forman parte del despliegue de ocupación ilegal del Reino Unido en Islas Malvinas.

"Los ejercicios británicos violan todas las recomendaciones aprobadas por las Naciones Unidas y por los acuerdos de los países con costas en el Atlántico Sur", apuntó el Secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, Daniel Filmus quien reiteró el llamado al Reino Unido a no realizar acciones militares en la región y a retomar las negociaciones diplomáticas por la soberanía.

Para el Gobierno argentino, las maniobras militares "constituyen una injustificada demostración de fuerza y un deliberado apartamiento de los llamamientos de las numerosas resoluciones de las Naciones Unidas y de otros organismos internacionales, que instan tanto a Argentina como al Reino Unido a reanudar las negociaciones".

Por otro lado, esta nación subrayó que seguirá manteniendo "su rechazo a la presencia militar británica en el Atlántico Sur, bregando por el apoyo internacional en ese sentido, que ya se ha manifestado en numerosos esquemas regionales, bajo la premisa de que esa presencia es contraria a la política de la región de apego a la búsqueda de una solución pacífica para la disputa de soberanía".

La cancillería recordó que la persistencia del Reino Unido en la realización de ejercicios militares en el Atlántico Sur, contraviene la resolución 31/49 de la Asamblea General de Naciones Unidas que insta a ambas partes a abstenerse a adoptar decisiones unilaterales que entrañen la introducción de modificaciones mientras se realiza el proceso de negociación recomendado por ONU.

Además, la presencia militar contradice la resolución 41/11 que exhorta a los estados de todas las demás regiones, en especial a los estados militarmente importantes, a respetar escrupulosamente la región del Atlántico Sur como zona de paz y cooperación, en particular mediante la reducción y eventual eliminación de su presencia militar en dicha región, concluye el texto. (I)