“No existe fuerza en el mundo que pueda parar la voz”, cantó Gustavo Santaolalla en el salón del Consejo Económico y Social de la ONU. Y ese verso encajó a la perfección con el histórico reclamo argentino por la soberanía de las islas Malvinas que disputa con Gran Bretaña.

El músico, junto al artista plástico Miguel Rep, fueron los protagonistas del Concierto por el Diálogo que organizó la representación diplomática argentina en Naciones Unidas justo cuando se cumplieron 50 años de la Resolución 2065, que recomendó que tanto Argentina como Inglaterra deben habilitar un diálogo para resolver el conflicto suscitado a partir de la invasión británica en las islas del Atlántico Sur, destacó diario Tiempo Argentino.

Mientras Santaolalla interpretaba sus composiciones, Rep dibujaba y pintaba un inmenso mural que se había colocado sobre el escenario para este concierto. Sin duda fue un acto poco común para las tradicionales y formales reuniones que se realizan en la ONU.

El acto lo abrió el canciller argentino Héctor Timerman (foto) junto a la embajadora ante la ONU, María Cristina Perceval, y el secretario de Asuntos Relativos a Malvinas, Daniel Filmus. El canciller aseguró que recurrir al arte como un método alternativo para reclamar por la soberanía no debería sorprender porque “a través de la música y la plástica también se puede luchar por un mundo mejor, pacífico y justo como promueven las Naciones Unidas”.

Muy cerca de Timerman estaban los legisladores que forman parte de la delegación que participó del Comité de Descolonización de la ONU, donde se reiteró el pedido para que el Reino Unido se siente a dialogar con Argentina sobre la soberanía del archipiélago, un reclamo que ha recibido el apoyo de diversos foros regionales y multilaterales. (I)