Presionado por la llamada a indagatoria de la Corte Suprema y a una semana de que su delfín político Iván Duque asuma la presidencia de Colombia, el exmandatario Álvaro Uribe da marcha atrás y frena su renuncia en el Senado.

“He pedido al senador Ernesto Macías, presidente de la Corporación (Congreso), que retenga sin considerar mi carta de renuncia. Por razones de honor nunca ha estado en mi mente que la Corte Suprema deje de conocer el caso para el cual me citan a indagatoria”.

Por su parte, Macías señaló a la emisora Blu Radio que “Álvaro Uribe ha reconsiderado su decisión (...) escuchó las súplicas de las bancadas -incluidas las de izquierda- para que no abandonara el Parlamento”.

Macías, quien es miembro del Centro Democrático, colectividad política de Álvaro Uribe, añadió que la carta de renuncia será “engavetada como lo pidió el expresidente”.

Precisó que el documento será devuelto a Uribe. “Es una carta muy sencilla en la cual expresaba su deseo de renunciar al Senado”.

El exmandatario colombiano informó el pasado 24 de julio, a través de Twitter, que enviaría su carta de renuncia al Senado a raíz de la llamada a indagatoria que le hizo la Corte Suprema el mismo día por presunta corrupción y fraude procesal por un caso de supuesta manipulación de testigos.

Ese día, Uribe tuiteó: “La Corte Suprema me llama a indagatoria, no me oyeron previamente, me siento moralmente impedido para ser senador, enviaré mi carta de renuncia para que mi defensa no interfiera con las tareas del Senado”.

El caso que involucra al expresidente y por el cual se levantó una polémica política en los últimos días en Colombia tiene que ver con una investigación que adelanta el alto tribunal por la presunta manipulación de testigos por parte de personas cercanas a Uribe para cambiar los testimonios en un caso de paramilitarismo denunciado por el congresista Iván Cepeda.

Tras el anuncio de renuncia, Uribe presentó pruebas para demostrar su inocencia y hasta radicó una recusación contra los magistrados de la Corte que llevan su caso por supuestas filtraciones de información. 

La recusación obligó a la Corte a suspender la investigación contra el expresidente mientras se tramita este recurso jurídico. Incluso, el alto tribunal  fijó el 3 de septiembre como día para que Uribe rindiera indagatoria, pero tras la suspensión ese trámite quedó en el limbo.

Sectores políticos consideran que el expresidente quería burlar la investigación en la Corte y llevar su caso a la Fiscalía General de la Nación. 

La investigación en la Corte
La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia ordenó en febrero pasado investigar a Uribe por un supuesto montaje con falsos testimonios para perjudicar al congresista Cepeda, quien adelantaba una investigación contra el exmandatario y su familia por presuntos nexos con grupos paramilitares.

En ese entonces, la Corte examinó los siete testimonios que Uribe cuestionaba y de los cuales el expresidente dijo que Cepeda compró o trató de manipular.

El tribunal encontró que Cepeda no participó en ninguna estrategia, pero en cambio halló pruebas de que los testigos fueron manipulados o amenazados para favorecer a otras personas.

Con base en interceptaciones telefónicas -más de 27.000 audios-, había pruebas para abrir una investigación contra el expresidente por su posible participación en la manipulación de testigos y fraude procesal. (I)