Al menos once personas murieron y otras 66 quedaron heridas en la explosión de una bomba frente a la Alta Corte de Nueva Delhi, en pleno centro de la capital india, apenas dos meses después de un triple atentado en Bombay que mató a 26 personas.

Según la Policía, aparentemente la bomba fue colocada en una maleta cerca de una de las principales puertas de entrada al tribunal. El artefacto estalló cuando unas cien personas hacían cola en un mostrador.

“Once personas murieron y 66 quedaron heridas”, declaró Rajan Baghat, portavoz policial. Un balance precedente daba cuenta de 10 muertos y 62 heridos.

La Policía publicó el retrato de dos sospechosos, elaborado sobre la base de declaraciones de testigos.

Los investigadores  dijeron haber recibido un mensaje electrónico, supuestamente enviado por un grupo islamista del sur de Asia, en el que se reivindica el atentado. La organización, que se presentó como el Harkat-ul-Jihad al-Islami (HuJI), es un grupo vinculado a precedentes ataques perpetrados en el territorio indio.

El mensaje enviado a los medios exige que la pena de muerte contra un indio de Cachemira, Mohamed Afzal Guru, sea anulada, o bien atacarán los tribunales más importantes y la Corte Suprema india. AFP