El asesinato del periodista mexicano Moisés Sánchez fue presuntamente orquestado por el alcalde del municipio donde residía, dijo este lunes el fiscal del estado de Veracruz (este), mientras el hijo del comunicador puso en duda que el cadáver hallado sea el de su padre.

La Fiscalía reportó la noche del domingo el hallazgo del cuerpo de Sánchez, quien fue secuestrado el 2 de enero en su casa por hombres armados, reconociendo que se encontraba "brutalmente lastimado" y prácticamente irreconocible.

En el crimen participaron policías del municipio de Medellín de Bravo coludidos con el crimen organizado bajo la instrucción del alcalde Omar Cruz, de acuerdo con las declaraciones a la fiscalía de un exagente detenido por el caso, quien señaló que Sánchez fue asesinado el mismo 2 de enero.

"El grupo delincuencial es contactado por el chófer y escolta personal del alcalde de Medellín, quien le pide desaparecer a Moisés porque les afecta mucho en el modo que ellos dicen que calienta la zona", dijo el fiscal de Veracruz, Luis Ángel Bravo, a la emisora MVS Radio, asegurando que este lunes pedirá al Congreso estatal que retire el fuero al edil para poder detenerlo.

Omar Cruz, del opositor Partido Acción Nacional (PAN, conservador), declaró en la fiscalía por el caso el pasado 12 de enero.

La organización de defensa de la libertad de expresión Artículo 19, con sede central en Londres, denunció recientemente que el alcalde estaba molesto con las publicaciones de Sánchez y había amenazado con "callarlo dándole una lección". El fiscal Bravo confirmó que su dependencia tiene "evidencias públicas" de las diferencias y amenazas del edil contra el periodista.

Sánchez, de 49 años, dirigía el periódico local La Unión de Medellín, una publicación que acostumbraba a publicar hechos relacionados con el narcotráfico y la corrupción en Medellín de Bravo, municipio vecino al importante puerto de Veracruz y situado a unos 400 km de la capital mexicana.

Para poder llegar a fin de mes, el comunicador compaginaba sus labores en el periódico con el trabajo de taxista.

"Dudo que el cadáver sea él"

En medio de la conmoción que la trágica noticia ha vuelto a suscitar entre el gremio de periodistas de México, el hijo de Moisés, Jorge Sánchez, hizo unas declaraciones a la misma emisora que podrían dar un giro al caso.

"He visto el cuerpo y no se parece. Yo dudo que sea él por ciertos rasgos muy marcados de él", dijo Jorge a MVS Radio, asegurando que hasta que la fiscalía general mexicana u otra instancia independiente no acredite con pruebas de ADN la identidad del cadáver, las autoridades no deben cerrar el caso.

"No quisiera que lo dejen de buscar o pongan en riesgo su vida", pidió Sánchez.

El fiscal Bravo reconoció que "no es un cuerpo que pueda reconocerse a través de los sentidos" por su gran estado de tortura pero aseguró que su dependencia confirmó la identidad del cadáver mediante una huella dactilar comparada con el acta de matrimonio del periodista.

Moisés Sánchez, que según medios mexicanos fue hallado decapitado, sería el onceavo periodista asesinado en Veracruz desde que el gobernador Javier Duarte (del oficialista PRI) asumió el poder en 2010 y el décimosexto desde 2000, según cifras de Artículo 19.

Veracruz es el estado más peligroso para ejercer el periodismo en México, un país donde al menos 82 periodistas han sido asesinados desde el 2000, según Reporteros Sin Fronteras.