Alberto II de Mónaco y Charlene Wittstock ya son marido y mujer
El príncipe Alberto II de Mónaco y la ex campeona de natación sudafricana, Charlene Wittstock, contrajeron matrimonio por lo civil, en breve ceremonia la Sala del Trono del Palacio de Mónaco.
El enlace lo ofició el presidente del Consejo de Estado, Philippe Narmino, que hizo una breve introducción en francés, inglés y monegasco, pero continuó el acto en francés, lengua oficial de la ciudad-estado.
Vestida de azul, el color de sus ojos, la joven rubia y alta recibió el título de Alteza Serenísima princesa de Mónaco, tras su matrimonio con Alberto II, 20 años mayor que ella y jefe del segundo Estado más pequeño del planeta, después del Vaticano.
La ceremonia comenzó puntual, a las 15.00 GMT, y apenas quince minutos después se dio por terminada, cuando los novios, primero Alberto II y después Charlene, firmaron en el registro.
Los testigos elegidos por la pareja fueron para el príncipe soberano Chris Le Vine, sobrino de la fallecida Grace Kelly, y Donatella Knecht de Massy, mujer de uno de los nietos de la también fallecida princesa Antonieta de Mónaco, en el caso de Charlene.
La ceremonia civil puso así fin a la incertidumbre que pesaba desde hace varios días sobre el enlace principesco, a raíz de los reportes de prensa revelando que Wittstock estaba decidida a suspender todos los preparativos de la boda y tomar un vuelo "sin retorno" rumbo a Sudáfrica.
En la plaza del Palacio, con pantallas gigantes instaladas para la ocasión, unos 5.000 monegascos, según las estimaciones de Palacio, presenciaron la unión.
Tras la boda, la pareja salió al balcón del Palacio a saludar a los súbitos.
La ceremonia religiosa tendrá lugar el sábado, no en la catedral donde se casaron los padres de Alberto, Rainiero y Grace Kelly, sino al aire libre, en el patio de honor del palacio.