Alan García, satisfecho por su labor como presidente de Perú
El presidente peruano, Alan García, afirmó hoy, un día antes de ceder su puesto a su Ollanta Humala, que se siente satisfecho con la labor de su Gobierno en los últimos cinco años.
En su último día como presidente, García encabezó como cada miércoles la sesión del Consejo de Ministros, momento que aprovechó para agradecer a los responsables ministeriales, presidentes regionales y alcaldes el trabajo desempeñado durante su mandato.
Fue el primer acto de la última agenda de García como presidente, y que hoy también incluyó una reunión con Felipe de Borbón, Príncipe de Asturias, otra con el ministro de Agricultura de China, Han Changfu y, finalmente, acabará con una cena oficial que ofrecerá a los mandatarios presentes en Lima para la asunción de mando de Humala.
"Quería agradecer a todos los que han puesto una gran cuota de esfuerzo en un trabajo que cada día se desempeña de la mejor manera", señaló García, y añadió que, "cuando se apaguen las pasiones, la historia sabrá reconocer lo que los ministros (de su Gobierno) lograron con esfuerzo".
Las últimas semanas de García en su puesto se han convertido en una carrera de inauguraciones, algunas de las cuales han sido criticadas por medios y políticos de la oposición por tratarse de trabajos sin finalizar o con deficiencias.
Entre estas inauguraciones destacan el Teatro Nacional, el nuevo Hospital del Niño, la remodelación del Estadio Nacional y la línea 1 del tren eléctrico, un proyecto que dejó inacabado durante su primer periodo de gestión, entre 1985 y 1990.
La última sesión del Consejo de Ministros finalizó con un brindis con champán realizado por García y en el que el mandatario saliente brindó "por el Perú, por la juventud, por los pobres del Perú, por las autoridades del Perú.
Por último, García recordó al fundador del Partido Aprista Peruano, Víctor Raúl Haya de la Torre, y señaló que como su seguidor, lo único que ha querido hacer es "un gobierno que dé pan con libertad".
Al Consejo de Ministros siguió la reunión mantenida con el príncipe Felipe de Borbón, que duró una media hora y en la que también participó el ministro de Relaciones Exteriores, José Antonio García Belaúnde, el único titular que se ha mantenido al frente de su cartera durante los cinco años del Gobierno de García.
Durante este encuentro, García recibió a través del príncipe de Asturias el saludo del Rey Juan Carlos y ambas partes expresaron su satisfacción por las excelentes relaciones que mantienen Perú y España.
Para finalizar el día, García tiene previsto recibir el saludo de los mandatarios que llegarán hoy a Lima para asistir mañana a la toma de mando de Humala.
Posteriormente, el político peruano ofrecerá una cena oficial en honor de los jefes de estado y de gobierno presentes en Lima.
Esta será el último acto de García como presidente si es que el mandatario saliente cumple su anuncio de que no participará en la transferencia de mando de mañana jueves.
A pesar de que la a tradición es que el presidente saliente sea quien entregue la banda presidencial a su sucesor, García tomó esta decisión, según sus propias palabras, para evitar pasar un mal trago como el que pasó en 1990, cuando fue recibido en el Congreso entre abucheos.
En círculos políticos peruanos ha sorprendido la actitud de Alan García con Ollanta Humala e, incluso, en medios periodísticos se subrayan las limitaciones que su equipo de prensa ha establecido para la cobertura internacional de la toma de posesión de su sucesor.
Aunque durante sus cinco años al frente del país Perú ha mantenido un alto nivel de crecimiento económico, otros puntos, como el aumento de los conflictos sociales y la inseguridad ciudadana, han oscurecido su Gobierno.