Al menos 28 personas perdieron hoy la vida a consecuencia de un deslizamiento de tierras causado por las fuertes lluvias en la zona de Bulambuli (este de Uganda), confirmaron la Cruz Roja y los servicios de emergencia.

El desprendimiento, ocurrido de madrugada, sepultó a 16 familias en la localidad de Kimuli, en las colinas de Bumwidisi, donde los servicios de emergencia y numerosos vecinos se afanan en encontrar supervivientes y recuperar los cuerpos de los fallecidos tras la avalancha, mientras varias casas todavía corren peligro.

Aunque de momento se han recuperado 28 cadáveres, las autoridades temen que una decena de personas más estén aún sepultadas por la avalancha, que sorprendió a las víctimas durmiendo.

Las labores de rescate están siendo coordinadas por la Cruz Roja y el presidente de consejo local, Simon Wananzofu, quien insistió en que las cifras de muertos son todavía provisionales.

El ministro ugandés de Prevención de Desastres, Musa Ecweru, tiene previsto dirigirse hoy a la nación para hacer una declaración sobre la tragedia, informó el Gobierno.

En marzo de 2010, un desastre similar que tuvo lugar en la región de Bududa, también en el este de Uganda, sepultó a más de 350 personas.

A principios de este mes de agosto, siete personas murieron y otras seis resultaron heridas por una avalancha de rocas en la localidad ugandesa de Naoyagum (noreste).

En los últimos dos años, las autoridades han tratado de convencer a los residentes en esas zonas de riesgo para que abandonasen sus hogares, pero siempre se han topado con una feroz resistencia.