Al menos 19 detenidos en una nueva jornada de protestas en Chile
Una nueva jornada de protestas ha sacudido la capital chilena, dejando al menos 19 detenidos y una nueva intervención de Carabineros de Chile, que ha empleado carros lanzaguas y granadas de gas lacrimógeno para dispersar a los cientos de manifestantes que se reunieron en avenida Alameda.
En los alrededores del palacio de Gobierno, La Moneda, los protestantes pedían la libertad de las personas detenidas durante las sucesivas manifestaciones que se han dado en el país desde el estallido social de octubre de 2019.
Según las autoridades policiales, hacia las 21:00 horas locales (19:00 horas peninsulares) se había detenido a 19 personas por los desórdenes que en un primer momento se concentraron el sector de Arturo Prat, en la calzada sur de la Alameda, y que después se extendieron hacia el sector de Miraflores, en la calzada norte. Los incidentes también se replicaron en algunas calles cercanas.
También se han formado barricadas y se ha asaltado una oficina bancaria, según informa 'La Tercera', mientras que en algunos puntos se han provocado enfrentamientos entre agentes y manifestantes. El asalto ha provocado un incendio en el que han tenido que trabajar tres unidades de bomberos para poder extinguirlo.
El Colegio de Periodistas de Chile ha informado que el reportero gráfico Sebastián Aravena ha sido detenido "mientras realizaba su trabajo en manifestación social".
La nueva jornada de protestas ha vuelto a afectar a la red de transportes de Santiago, donde se han tenido que imponer desvíos preventivos de buses del transporte público y se han cerrado las estaciones de La Moneda, Santa Lucía, Universidad de Chile y Universidad Católica, todas en el eje de la Alameda y cercanas al Palacio de Gobierno.
La manifestación se ha convocado mediante las redes sociales y el objetivo era llegar a La Moneda. La multitud cargaba con pancartas exigiendo la libertad de las personas detenidas en el contexto del estallido social, a quienes consideran "presos políticos", tal y como recoge Radio Cooperativa.
El jefe de la zona Metropolitana, el general Marcelo Araya, ha condenado las protestas, ya que "una vez más los días viernes interrumpen toda la jornada (las protestas), afectan los derechos, y terminaron con detenidos, lo que ha sido una costumbre".
Ya se ha cumplido un año del inicio del estallido social chileno, las mayores movilizaciones sociales de la historia reciente de Chile. Comenzaron como una movilización contra la subida del precio del transporte público, pero desembocaron en denuncias más amplias en contra de la desigualdad social y a favor de una nueva Constitución, que finalmente se aprobó en un plebiscito el pasado 25 de octubre. (I)