Al Asad agradece a Putin en Moscú ayuda militar rusa
El presidente sirio se entrevistó el martes en Moscú con su homólogo ruso Vladimir Putin, a quien le agradeció la intervención militar rusa en Siria, en su primer viaje oficial al exterior desde el inicio de la guerra civil.
La visita sorpresa de Al Asad, anunciada en Moscú y confirmada por Damasco tras el regreso del mandatario sirio a su país, tuvo lugar cuando comienza la cuarta semana de bombardeos rusos.
La entrevista subrayó la determinación de Rusia de apoyar a Siria y al presidente Al Asad, al que las imágenes difundidas por el Kremlin muestran sonriente y distendido.
"Me gustaría agradecer una vez más al pueblo ruso su apoyo a nuestro país y expresar la esperanza de que venceremos al terrorismo", dijo Al Asad, según la prensa rusa.
"De no haber sido por las acciones de Rusia, el terrorismo se habría propagado por la región, se habría apoderado de un territorio aún más grande", agrego.
Al Asad y Putin se entrevistaron cara a cara en el Kremlin y luego cenaron juntos en compañía de los principales ministros de la seguridad y la diplomacia rusas.
Estaban presentes los ministros rusos de Defensa, Serguei Choigu, y Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, y los jefes del Consejo de Seguridad ruso, Nikolaï Patrushev, y del contraespionaje (SVR), Mijail Fradkov.
"A pedido suyo hemos aportado una valiosa ayuda al pueblo sirio en la lucha contra el terrorismo", dijo Putin.
"Las operaciones aéreas rusas en Siria se llevan a cabo en el marco del derecho internacional", dijo Al Asad, según la agencia siria de noticias SANA.
Ambos presidentes coincidieron en que después de las operaciones militares debe haber un "proceso político".
"Estamos dispuestos a hacer cuanto podamos no sólo en la lucha contra el terrorismo sino también en el proceso político", le dijo Putin a Al Asad.
"Obviamente, todos entienden que cualquier acción militar requiere los consiguientes pasos políticos", respondió Al Asad.
Una solución política del conflicto es posible "con la participación de todas las fuerzas políticas, étnicas y religiosas" del país, recordó el mandatario ruso.
"La última palabra sobre la solución del conflicto en Siria la debe tener el pueblo sirio", insistió Putin.
Turquía reaccionó con ironía a la visita de Al Asad a Moscú, pero al mismo tiempo reafirmó cierta evolución en su posición con respecto a una solución del conflicto.
"Si Al Asad pudiera quedarse por mucho tiempo en Moscú" eso "permitiría a su pueblo recuperar y comenzar un período de transición", dijo el primer ministro Ahmet Davutoglu.
Sin embargo, Davutoglu dijo que una transición política en Siria debe encontrar una "fórmula que garantice la partida" de Al Asad.
"No se trata de una de transición con Al Asad, pero es necesario un período que garantice su partida", agregó Davutoglu.
Por otra parte, Putin destacó la importancia que tiene para la seguridad rusa la intervención en Siria.
"No podemos permitir que gente de la antigua Unión Soviética con experiencia militar y entrenada por los terroristas en Siria aparezca en el territorio de la Federación de Rusia", dijo Putin.
"Un mínimo de 4.000 personas de la antigua Unión Soviética luchan contra las tropas gubernamentales de Siria", agregó.
Tras la visita de Al Asad, una delegación parlamentaria rusa viajará el jueves a Siria.
Sigue la ofensiva del régimen
En el terreno, el ejército sirio continuaba su ofensiva en las provincias centrales de Homs y Hama y en la norteña Alepo.
Esas ofensivas provocaron el éxodo de unas 100.000 personas en esas provincias, afirmó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Estados Unidos, que bombardea al Estado Islámico desde hace más de un año, y Rusia firmaron el martes un memorando para impedir incidentes entre aviones de ambos países en el cielo sirio, lo que va a facilitar el apoyo aéreo ruso a las fuerzas sirias.
El conflicto sirio, que se desencadenó en marzo de 2011, causó la muerte de más de 250.000 personas, cuatro millones de exiliados y siete millones de desplazados dentro del país. (I)