99 cubanos entre los 110 muertos en accidente en La Habana
Los 99 cubanos fallecidos en el accidente aéreo ocurrido el viernes 18 de mayo en La Habana procedían de seis provincias y el municipio especial Isla de la Juventud del país caribeño, informan medios oficiales.
El Boeing 737 accidentado, rentado por la aerolínea Cubana de Aviación a la compañía mexicana Golder Air, se dirigía a la provincia de Holguín, donde residían 67 de las víctimas fatales del siniestro.
Otros de los fallecidos en el vuelo DMJ-972, que se estrelló contra una zona de cultivos minutos después de despegar, procedían de las provincias occidentales de La Habana, Pinar del Río, Matanzas y Mayabeque, la central Sancti Spíritus, la oriental Las Tunas, y el municipio especial Isla de la Juventud (a 163 kilómetros al sur de la capital).
En la aeronave viajaban 113 personas, de las que fallecieron 110, entre ellas 11 extranjeros (dos argentinos, un saharaui, un saharaui-español y 7 mexicanos, de ellos una turista y los seis miembros de la tripulación).
A la catástrofe sobrevivieron tres mujeres de nacionalidad cubana que se encuentran hospitalizadas en La Habana en estado crítico.
El proceso de reconocimiento de las víctimas en el Instituto de Medicina Legal de La Habana comenzó el sábado 19 de mayo tras la llegada de los familiares, y por el momento hay quince cuerpos identificados, entre ellos los de los cinco niños fallecidos en el accidente.
Las labores de identificación pueden durar varios días e incluso semanas, según han advertido sus responsables, debido a que el violento choque desperdigó mucho los restos del avión, lo que impide a los expertos guiarse por los números de asiento que tenían asignados los pasajeros.
En paralelo, continúan las investigaciones en el lugar donde se desplomó el avión, un área de cultivos aledaña al aeropuerto, donde un equipo de expertos busca datos que ayuden a esclarecer lo ocurrido.
Se espera que en las próximas horas aparezca la segunda caja negra del vuelo (la que registra los datos técnicos del aparato), y que en breve se conozca el contenido de la primera caja negra, la de voz, que ya está en poder de los investigadores. (I)