Damasco.-

La campaña aérea de la coalición liderada por Estados Unidos contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI) ha dejado 119 civiles muertos en recientes bombardeos en Irak y en Siria, con lo que asciende al menos a 603 el número total de civiles fallecidos en estos ataques.

La coalición terminó en mayo el análisis de 141 informes sobre los civiles muertos desde el comienzo de las operaciones contra el grupo EI a finales de 2014, precisó ayer la alianza en un comunicado.

“A día de hoy, sobre la base de las informaciones disponibles, (la coalición) evalúa en (...) al menos 603 el número de civiles muertos de manera involuntaria por ataques de la coalición” desde el comienzo de las operaciones, indica.

Además de las informaciones de pilotos de la coalición, las redes sociales y otros canales de comunicación, los investigadores del ejército estadounidense tuvieron que verificar centenares de alegaciones del sitio Airwars.org, un equipo de periodistas y de investigadores basados en Londres cuyos balances difieren de los de la coalición.

Según un balance reciente de Airwars, 4.354 civiles han muerto en dichos ataques.

Los observadores afirman que la coalición ha tomado más riesgos en término de víctimas civiles desde la llegada al poder del presidente estadounidense, Donald Trump, que dio a los militares más margen de maniobra sobre la manera de llevar a cabo los bombardeos, si bien los responsables militares afirman que las reglas del juego no cambiaron.

Alto el fuego al suroeste de Siria

Estados Unidos y Rusia acordaron ayer declarar un alto el fuego en el suroeste de Siria a partir de mañana a las 12:00 locales (09:00 GMT), anunció el ministro de Exteriores ruso Serguei Lavrov al margen de la cumbre del G20.

“Hoy en la capital de Jordania, expertos rusos, estadounidenses y jordanos (...) se pusieron de acuerdo sobre un memorando para crear una zona de desescalada” en las regiones de Deraa, Quneitra y Sueida, dijo Lavrov.

“En esta zona habrá un alto el fuego a partir de las doce, hora de Damasco, a partir del 9 de julio”, añadió.

En un primer momento, “la seguridad en torno a esta zona será garantizada por fuerzas y medios de la policía militar rusa en coordinación con los jordanos y los estadounidenses”, precisó Lavrov.

Rusia e Irán, aliados de Damasco, y Turquía, que apoya a los rebeldes, adoptaron en mayo el principio de creación de cuatro zonas de seguridad para instaurar una tregua duradera en varias regiones. Sin embargo, no se pusieron aún de acuerdo sobre la forma en que serán administradas.

Moscú considera que la zona de “desescalada” prevista en el sur del país solo se puede establecer con el acuerdo de Estados Unidos y de Jordania, país fronterizo con Siria.

Las otras tres zonas identificadas son junto a la región de Idlib (noroeste), parte de la provincia de Homs (centro) y Ghuta, región controlada por la oposición cerca de Damasco.

En terreno, las fuerzas antiyihadistas apoyadas por Estados Unidos intentaban progresar ayer en la ciudad siria de Raqa, controlada por el EI, que dificulta el avance utilizando morteros y coches bomba, indicó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

Las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) -una alianza de combatientes kurdos y árabes- ingresaron en la ciudad vieja de Raqa esta semana. Los bombardeos de la coalición liderada por Washington permitieron abrir dos brechas en la muralla que rodea el casco antiguo.

Pero las FDS y una unidad de combatientes árabes llamada Fuerza de Élite Siria avanzaron poco dentro del casco histórico.

En su contraofensiva, los yihadistas del “Estado Islámico utilizan coches bomba, morteros y francotiradores dentro de la ciudad vieja”, señaló Rami Abdel Rahman, director del OSDH.

Las FDS intentan expulsar a los yihadistas de Raqa. Necesitaron siete meses para avanzar y rodear la ciudad, adonde ingresaron el 6 de junio. En su avance tomaron regiones alrededor de esta ciudad del norte de Siria.

El OSDH estima que actualmente un 30% de Raqa fue reconquistado a los yihadistas.

Mohamad Jaled Shaker, un portavoz de la Fuerza de Élite Siria, dijo que no hubo avances notables ayer. “Hay algunos enfrentamientos pero no llegamos aún al centro de la ciudad”, afirmó el portavoz.

Esta fuerza, formada a principios de 2016, cuenta con centenares de combatientes originarios de las tribus árabes de Raqa y de Deir Ezzor. Se unieron a la ofensiva contra el EI en diciembre de 2016 y combaten junto a las FDS en Raqa.

Los yihadistas del EI tomaron Raqa a principios de 2014 y la autoproclamaron como la capital de su “califato”. La ciudad es tristemente célebre por las atrocidades que allí cometió la organización extremista.

La coalición liderada por Estados Unidos estima en 2.500 los combatientes yihadistas aún en Raqa. Esta alianza que respalda a los combatientes kurdo-árabes provee cobertura aérea, armas y equipamiento. Además, en el terreno, fuerzas especiales las asesoran.  

El OSDH informó el jueves que la coalición entregó a través de Irak a las FDS un importante cargamento compuesto de armas, munición y vehículos blindados de combate. (I)

DATOS

El 15 de marzo del 2011 comenzaron unas protestas sin precedentes en Siria, país soberano del Oriente próximo gobernado desde hace 40 años por la familia Asad.

El 17 de julio de 2012, el Ejército Sirio Libre (ESL) lanzó la batalla de Damasco y conquistó algunas zonas de las afueras.

Desde abril de 2013, el movimiento islamista libanés Hezbolá, aliado de Irán, intervinó en Siria para ayudar al régimen.

En 2014, el grupo yihadista Estado Islámico (EI) conquistó regiones del noreste de Siria.

El 23 de septiembre de 2014, una coalición internacional liderada por Estados Unidos empezó a bombardear posiciones del EI.

El 30 de septiembre de 2015, Rusia también emprendió una campaña de bombardeos contra grupos “terroristas” como el EI. (I)