40.000 evacuados en Asunción por inundaciones en Paraguay
Cuarenta mil personas tuvieron que abandonar sus hogares en tierras bajas de Asunción por la crecida del río Paraguay, la segunda en un año, informaron el viernes fuentes de la alcaldía.
"El 15% de los damnificados ya fueron socorridos el año pasado y volvieron a pedir ayuda del Estado para ser reubicados en zonas altas de la capital", dijo a periodistas la directora del Consejo Municipal de Emergencia y Desastres, Nidia López.
Según la secretaría de Emergencia Nacional y el Consejo Municipal de Emergencias y Desastres, 7.800 familias debieron ser evacuadas, lo que significa unas 40.000 personas.
La Dirección de Meteorología atribuyó la riada al fenómeno "El Niño" y advirtió que, a pesar de haberse iniciado esta semana una lenta bajada, las aguas del Paraguay -que bañan Asunción en su litoral oeste- podrían volver a crecer.
"La situación sigue siendo crítica", advirtió la experta de la comuna asunceña.
Los damnificados están siendo reubicados en 70 terrenos privados, municipales o pertenecientes al Ejército.
Entre otros lugares, la inundación dejó bajo las aguas la canchita del barrio donde el papa Francisco reunió el pasado 12 de julio a unos 10.000 "bañadenses", familias humildes de los humedales, que tuvieron ahora que abandonar sus hogares.
El nivel del río llegó a 6,11 metros, cuando los niveles normales se ubican por debajo de los 5,50 metros.
Nidia López reveló que entre este jueves y viernes había aumentado la cantidad de familias evacuadas.
En los bañados de Asunción, terrenos municipales donde los habitantes no tienen título de propiedad, viven unas 140.000 personas.
El Gobierno tiene un plan llamado "Franja Costera" que consiste en levantar un muro de contención que proteja las zonas inundables, una obra por la que están reclamando los afectados.
"Hace décadas que las autoridades prometen una solución pero no ejecutan el presupuesto", se lamentó Hugo Fernández, un ribereño que ganó en su barrio las elecciones internas del partido Colorado oficialista y que tiene su casa bajo el agua.
"Con lo que se gasta en cada evacuación ya se podrían haber construido dos franjas costeras", afirmó. (I)