Al menos 32 personas murieron y cerca de 60 resultaron con heridas de gravedad al explotar un mercado de pirotecnia en el pueblo de Tultepec, estado de México, en una tragedia que muchos lamentan estaba anunciada.

A las 14:50 se escuchó la primera explosión en el mercado San Pablito y desde entonces no hubo pausa, cohetes, fuegos artificiales y bombas detonaban al mismo tiempo incendiándolo todo en un predio de 4,5 hectáreas que se estima reunía unas 300 toneladas de pólvora, donde había cerca de 2.000 personas, entre locatarios y compradores. Varios minutos duró el fuego: destruyó todo cuanto había, llegó más allá porque la onda expansiva alcanzó vehículos y casas cercanas.

De las 31 víctimas registradas hasta el cierre de esta edición, 26 fallecieron en el lugar de la explosión y cinco en hospitales, a causa de las heridas sufridas. Fueron 7 hombres, 15 mujeres y 8 menores de edad. Aún no se determina quiénes eran vendedores y quiénes clientes; varios cuerpos están calcinados y no han podido ser identificados. Además, al menos 11 personas continúan desaparecidas.

Se trata de una tragedia anunciada, critican muchos, porque los accidentes eran frecuentes en Tultepec, un pueblo donde el 90% de la población se dedica a elaborar pirotecnia (611 familias, según Protección Civil).

El mercado de San Pablito fue creado en el año 2000 y era el más grande del país con 300 puestos de venta distribuidos en 75 módulos. Sufrió dos explosiones en 2005 y 2006, por lo cual fue reconstruido y reinaugurado en la última ocasión por el presidente Enrique Peña Nieto, cuando se desempeñaba como gobernador del estado de México.

Pero esos no fueron los únicos accidentes en Tultepec, cada año ocurren unas 30 explosiones en talleres de pirotecnia del Municipio con cinco o seis fallecidos como promedio, según el alcalde de la localidad, Armando Portuguez Fuentes.

En 1998 fallecieron en un accidente 10 personas, otras cuatro en el mismo año y en 2002 se perdieron 12 vidas en hechos similares. En los últimos 12 meses hubo al menos 11 explosiones, ninguna tan grave como la que ocurrió este 20 de diciembre.

Una semana antes de la tragedia, las autoridades aseguraron que el mercado era el más “seguro” de América Latina, porque tiene “puestos perfectamente diseñados y con espacios suficientes para que no ocurriera una conflagración en cadena en caso de un chispazo”, expresó entonces Juan Ignacio Cordera, director del Instituto Mexiquense de Pirotecnia, institución que depende del gobierno provincial.

También avalaba su funcionamiento la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), que otorgó los permisos para la comercialización legal de pirotecnia. (I)