Especial
Edición N°. 200
El 21 de octubre de 2011 circuló por primera vez con diario EL TELÉGRAFO el suplemento cultural CARTÓN PIEDRA, un espacio, como reza el lema, suscitador del pensamiento. La publicación surgió como respuesta a una necesidad: fuera de unas cuantas páginas en diarios, los contenidos culturales escasean, porque a veces la sociedad y los medios olvidan que si para algo sirven el arte y las ciencias humanas, es para ejercer el pensamiento crítico.
Desde entonces, el suplemento le ha dado espacio a nuestros escritores, nuestros artistas, nuestros historiadores, nuestros pensadores..., nuestras voces, en un repaso por las manifestaciones artísticas desde distintos niveles de lectura, y distintas formas de entender al arte y la cultura.
El escritor mexicano Julio Aguilar, en una columna para la revista Letras Libres, hablaba del fin del periodismo cultural en medio de la batalla que libra la prensa escrita para mantenerse en el tiempo de internet. “El periodismo cultural claramente está en la lista de esos fardos de los que hay que deshacerse para salvar objetivos financieros puros y duros”. La cultura es tan inútil como la historia: solo sirven para entender lo que sucede a nuestro alrededor. Como dice Leila Guerriero: “El pasado es la única cosa que explica el presente”. Y por eso el periodismo cultural es tan valioso.
Desde aquel 21 de octubre de 2011, el negocio de CARTÓN PIEDRA ha sido difundir la cultura, esa fuente inagotable de contexto. Y lo ha hecho doscientas veces en doscientas ediciones de puro pensamiento.