‘Don Naza’, el vozarrón esmeraldeño que seduce a la vida
Revisa el Especial De Taitas y De Mamas
Cuando “Don Naza” canta parece que se despiertan vapores de la tierra. La música de este extraordinario vocalista afroecuatoriano de más de 90 años es capaz de invocar los espíritus antiguos, como un mantra. Su voz se amalgama a la marimba en sus notas más graves y cuando se pasa a las agudas, Segundo Nazareno estira sus frases hasta el punto en el que no hay retorno. La música y su arte se hamacan mutuamente hasta el sopor y la embriaguez en un juego infinito.
Él es la voz cantante, el hombre, el artista y, con esta figura máxima de la música ecuatoriana se inicia la serie discográfica De taitas & de mamas, un esfuerzo del Ministerio Coordinador de Patrimonio y la productora Mariandalab, al mando del conocido músico Ivis Flies.
Los discos se distribuirán con este periódico y con el matutino El Comercio, cada miércoles a partir del 1º de mayo. Estos CD únicos por su contenido y presentación estarán al alcance de todos los ecuatorianos a solo 2.50 dólares. ¿Piensa perderse esta oportunidad?
La agrietada voz de “Don Naza” reacciona como un resorte “al ataque” de un tambor; al beligerante güiro lo deja estar en un segundo plano destinado a convertirse en la sombra de su vozarrón portentoso que repite y repite: “Yo le pedía y ella me daba por la mañana”, lo hace tantas veces, tantas, que la frase se vuelve como el dulce de coco en la boca.
La estirpe de “Don Naza” es la de los arrullos bambucos, chigualos y décimas. Es el ritmo que se escucha cuando hay fiesta en las casas de Río Verde un domingo, luego del almuerzo familiar. Son los tonos de la zona norte de Esmeraldas, la que los negros tocan de memoria con los dedos, sobre el borde de la canoa y la atarraya.
Por lograr como ningún otro estas combinaciones repletas de vida y energía, Segundo Nazareno fue escogido como el Mejor Cantante Afro del Pacífico Sur, un importante reconocimiento entregado en Colombia en el V Festival Petronio Álvarez de Cali, tanto por su interpretación vocal, como por la calidad de sus músicos, quienes también han dedicado su vida entera al arte de tradición musical.
Empezar con “Don Naza” la serie de De taitas & de mamas no es un hecho casual. Como señala el productor Ivis Flies, mentalizador de este proyecto, “él es uno de los mimados de toda esta producción”. Prácticamente la idea surgió de los continuos contactos entre ambos. Remontémonos al año 2007.
Siempre con ánimo de conocer más sobre nuestra música e incorporarla a su producción, Flies conoció a “Don Naza” e inmediatamente, nació el interés de revivir la música esmeraldeña. Ya desde ese momento, el grupo Bambuco se convirtió en el acompañamiento ideal para plantear un proyecto de valor patrimonial.
Así se llegó a la primera parada del que posteriormente sería el proyecto De taitas & de mamas. Esas 11 canciones, entre las que se encuentran algunas conocidas como Andarele y Canoíta se sumaron a otros temas como Prenda del alma, Bambuco, Caramba, Agua larga, Torbellino y El puerco y el compadre, esta última basada en el segmento de un cuento de la autoría de Segundo Nazareno.
El grupo con el paso de los años ha ido cambiando su configuración, en la actualidad se encuentra el conocido Lindberg Valencia al mando del cununo y el djembe, instrumentos de percusión. De la marimba se encarga Alfredo Caicedo; Hugo Quiñónez, del bombo tradicional y Luis Carlos Castillo, del cununo restante.
Cuenta Flies, que el proyecto debió superar una serie de obstáculos, hasta conseguir el apoyo de una ONG. En esa oportunidad, además de la circulación del CD se realizaron varios conciertos en un conocido bar capitalino.
Desde ese momento, se dejó manifiesto que todas las acciones de “Don Naza” y el grupo Bambuco están enmarcadas en la preservación y revitalización del patrimonio cultural intangible, el cual corre un alto peligro de desaparecer.
De ahí que se busque conservar una fuente cultural muy importante como es la música de Don Naza, propiciar en las nuevas generaciones el conocimiento musical de los diversos géneros de su pueblo. ¡Ojo! No se trata de competir con los gustos musicales de otros sino de registrar un trabajo para que no desaparezca y, además, para que el trabajo de los músicos sea valorado y, por ende, remunerado.
Toda la producción tiene también un valor didáctico, pues a través de los discos es posible hacer un mapa sobre el desarrollo de la música en diferentes regiones.
Los 36 mil discos de la colección circularán a través de los diarios El Telégrafo y El Comercio, y el producto de su venta irá directamente a los seis creadores, mientras que otro porcentaje servirá para dar sostenibilidad al proyecto.
Razones sobran para apoyar a De taitas & de mamas
Existen muchas razones para comprar los CD de De taitas & de mamas. La primera es, sin duda, la calidad interpretativa de los músicos, algunos más conocidos como Papá Roncón, Don Naza y Las Tres Marías; otros como Mishqui Chullumbo, Mariana Palacios, Julián Tucumbi cuentan ya con un reconocimiento, que de a poco, se ha ido extendiendo.
Paralelo al proceso de grabación de los discos, se realizaron visitas de brigadas médicas del Ministerio de Salud. La importancia de este hecho, la explica la productora Mariana Pizarro, “por su edad, ellos requieren una permanente supervigilancia médica, algunos como “Don Naza” han superado con éxito problemas de cierta consideración”.
Médicos locales realizaron exámenes a los músicos y en líneas generales se encuentran bien de salud; sin embargo, todos quedaron bajo supervigilancia médica.
De taitas & de mamas es un proyecto integral, tal como lo explicó la Ministra Coordinadora de Patrimonio, en un encuentro con la prensa. “Un importante porcentaje de la venta de los CD será para estos sabios músicos que han dado su vida por un arte verdaderamente auténtico”, subrayó. Con esta producción se busca resguardar el patrimonio sonoro del Ecuador que por décadas, germinó en las trincheras del talento de estos guardianes.
La idea es que un 30% de las ganancias que genere el CD pase a las seis leyendas y a sus músicos. “Es absolutamente justo, pues en Ecuador recién se está trabajando en el respeto por los derechos de autor y es un asunto de mínima justicia apoyar de esta forma a los músicos”, subraya el también músico Ivis Flies.
Mejoras en la calidad de vida, justicia económica y apoyo a la industria discográfica nacional son varias de las razones para no perderse estos CD.