Tres bancos asaltados en cinco meses en Guayaquil

El único guardia de seguridad que custodiaba la agencia del Banco Guayaquil, del centro comercial City Mall, donde este lunes se registró un asalto, permitió que los delincuentes ingresaran con gorras.

Ante esta situación, el mayor Patricio Arroyo Barragán, jefe (e) del distrito Florida, cuestionó el incumplimiento de los protocolos internos de seguridad de la entidad financiera. “Los delincuentes entraron con gorras... una falla bastante grande del personal de seguridad del banco”.

Arroyo fue más allá y reveló que el custodio también estaba a cargo de las dos puertas de la agencia bancaria, una que da hacia el área de estacionamiento, al interior y, la otra a la avenida Felipe Pezo Campuzano. “Al final, el guardia no opuso resistencia pensando en su vida y fue despojado de su arma de dotación”.

Clientes del banco, cuyas identidades no revelaron por seguridad, aseguraron que los custodios no son muy rigurosos con ellos y en otras ocasiones permiten hasta hablar y chatear dentro de la entidad financiera. “Los guardias de esta agencia y de otras se dedican a todo, menos a dar seguridad a clientes y a los propios empleados del lugar”, sostuvo un testigo.

La queja ciudadana fue acogida por el teniente coronel Carlos Coloma, jefe de la Subdirección de Investigaciones de Delitos Contra la Propiedad y Brigada Anticriminal (Sidprobac) de la Zona 8, quien manifestó que los guardias de seguridad son desviados de sus funciones y realizan tareas operativas bancarias que no están entre sus obligaciones.

“Usted o cualquier ciudadano ha sido testigo, en casi la mayoría de los bancos, cómo los guardias son los que entregan tickets para la atención en ventanillas y otros servicios, son ellos muchas veces quienes dan información al usuario donde dirigirse y cumplen tareas hasta de mensajeros y porteros... esto los distrae de su trabajo”, expresó el jefe de la Sidprobac zonal.

Recordó que los celadores bancarios deben estar atentos ante cualquier movimiento extraño de personas sospechosas que pueden estar en el interior o exterior de la agencia bancaria. “De estas vulnerabilidades se aprovechan los antisociales y los dirigentes de los bancos no pueden desconocer esto”.

Para corregir estas fallas en la seguridad de las entidades, Coloma, aseguró que mantienen reuniones periódicas con los responsables de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (ABPE) y con los directivos de las empresas de seguridad que trabajan para el sector financiero.

“La coordinación es permanente y fluida. Por este motivo, en 2016 y este año se han realizado charlas de seguridad para los guardias, donde se les ha proporcionado ciertos detalles que les permitan mejorar su trabajo y así precautelar los bienes y la vida de la ciudadanía”, mencionó el jefe policial.

Recomendó a las empresas de seguridad privada actualizar a sus celadores en el estudio de perfiles de riesgos para identificar las potenciales amenazas.

Bancos coordinan con Policía

El presidente de la ABPE, Julio José Prado, dijo que la entidad busca el fortalecimiento de la lucha contra la delincuencia común y organizada que ponga en riesgo la seguridad de sus clientes e instituciones. “Por eso, siempre hay una comunicación constante con la Policía”.

Explicó que un elemento fundamental de la seguridad bancaria es la prevención e información que los bancos privados brindan  acerca de los servicios y la manera que deben utilizarlos.

Respecto a las seguridades electrónicas para evitar fraudes,  Prado agregó que las medidas y dispositivos utilizados por las instituciones se actualizan permanentemente para estar un paso adelante de la delincuencia que también ha sofisticado sus métodos.

La ABPE en su página institucional recuerda a la ciudadanía que en enero de 2011, la Superintendencia de Bancos a través de la Resolución 1851 estableció medidas generales de seguridad que deben cumplir las entidades financieras. Entre las recomendaciones están el mantenimiento de guardias de seguridad, espacios iluminados, sistemas de vigilancia, puertas con cerraduras y llaves codificadas, manuales de seguridad y políticas de protección y sistemas de seguridad.

Ante las deficiencias en la seguridad de las empresas contratadas, Prado dijo que depende de las medidas de corrección de cada entidad.

Con la agencia del banco de Guayaquil son tres las entidades financieras asaltadas en la ciudad en estos cinco meses del año. (I)