Este miércoles 3 de febrero se cumple una semana del asesinato del actor, presentador y motivador, Efraín Ruales Ríos, de 36 años, y todavía no se conoce quiénes fueron los autores materiales ni intelectuales de este crimen al estilo sicariato, ocurrido el miércoles 27 de enero, en la avenida Guillermo Cubillo.

La Fiscalía, quien actúa de oficio, se encuentra tomando las versiones de familiares, amigos y personas del entorno del presentador.

El martes 2 de febrero, le tocó rendir su versión en la Policía Judicial, a Alejandra Jaramillo, la novia de Ruales, quien fue la última persona que lo vio con vida, además de quienes estuvieron la mañana del miércoles 27 de enero, día del crimen, en el gimnasio Mirador Fit-House, al que concurría Ruales, ubicado al norte de Guayaquil. Un guardia de seguridad privada también dio su versión.

Esa mañana, a pocos minutos de haber salido de dicho gimnasio, camino a su domicilio, al presentador le dispararon desde otro vehículo en movimiento.

Según la Policía, tres impactos de bala por el lado izquierdo (del conductor) y uno por el lado derecho impactaron en el vehículo de Ruales. Uno de esos impactos perforó la parte intercostal de su cuerpo provocando lesiones que derivaron en su fallecimiento.

El fiscal a cargo del caso, Víctor González, indica que los relatos de las personas llamadas a rendir su versión les permitirá tener una línea de investigación, según reportó Ecuavisa.

Lo único que hasta el momento se conoce es que el asesinato no se cometió por robo. Y los tres sospechosos que fueron detenidos luego del crimen fueron procesados por otros delitos, pero no estarían involucrados en el crimen del presentador.

Neib Jiménez, encargado de la comandancia zonal de Policía, indicó que se desarrollan varias diligencias, entre ellas identificar a una mujer que según versiones de testigos, manejaba el carro desde el cual se le disparó al actor.

También se conoce que el vehículo desde donde le dispararon a Ruales, el mismo día del crimen, por la noche, fue incinerado en las calles 25 y la G, en el suburbio de Guayaquil.

Según la Policía, esta acción obedecería a que los asesinatos querían borrar todo tipo de huellas. Moradores del sector manifestaron que tres personas, incluida una mujer, estaban en ese vehículo y que todos utilizaban guantes.

Además, dijeron que antes ya se veía a personas merodeando por el sector y que fueron otros dos individuos los que les prendieron fuego al carro.

Arma no fue alquilada

Según un experto en tiro práctico, cuya identidad omitimos por seguridad, el arma 9 milímetros que fue usada en el crimen de Efraín Ruales, no fue alquilada y los sicarios que cometieron el asesinato antes estuvieron en entrenamiento para disparar a un vehículo en movimiento. “Eso no lo hace cualquiera”.

Asimismo, explicó que el sicario dispara con el arma que usa en su entrenamiento porque ya la conoce, sabe la velocidad a la que sale el proyectil del arma, la distancia a la que puede causar daño.

Se conoció que este miércoles 3 de febrero declararía otro guardia de seguridad. 

A una semana de este crimen, su novia, Alejandra Jaramillo, hizo alusión al tiempo que Ruales ya no está a su lado, publicando la captura de varios chat donde ambos se reiteraban el amor que se tenían el uno por el otro. (I)