Rector deslinda culpa en caso de chicas drogadas
Los moradores de la primera etapa de la ciudadela la Alborada, al norte de Guayaquil, denunciaron que en el parque que fueron encontradas dos adolescentes de 15 años inconscientes y, presuntamente, drogadas, la tarde del lunes anterior, es un “fumadero” y “punto de encuentro” de personas de “mal vivir”.
El área verde, que supuestamente es de recreación, está ubicada a menos de una cuadra del colegio Ismael Pérez Pazmiño, donde estudian las dos menores.
Carlos Carrasco, rector del plantel educativo, manifestó que el consumo de las alumnas fue fuera del establecimiento, puesto que las encontraron en ese estado después de la hora de salida, a las 13:00. “El récord de ellas no es bueno. Si fue aquí que las drogaron que den nombres y apellidos, pero nadie denuncia. Si saben deben decir nombres”, fustigó.
Este criterio ofuscó a la madre de una de las víctimas que gritó ¡Mentira! “Mi hija no es ninguna drogadicta. Ella se recupera en el Hospital Universitario y me contó que todo ocurrió en el bar del colegio cuando dos compañeros les ofrecieron un jugo, desde ahí no recuerda nada”, continuó.
La mujer mostró un informe con los resultados de los exámenes que les realizaron a las adolescentes que salieron negativo para marihuana y cocaína. Las progenitoras presumieron entonces que sería escopolamina u otro fármaco. “El mismo rector me dijo a mí que aquí hay delincuentes y no puede hacer nada”, indicó la madre.
Una moradora, que prefirió no identificarse, comentó que junto a su vivienda, situada frente al colegio, observa a diario que menores expenden droga. “Escucho que dicen tengo de esta y de la de acá. Hay alumnos que han sido expulsados que vienen en carros de lujo a comercializar”, confesó.