Siete personas fueron sentenciadas, la noche del lunes 14 de octubre de 2019, a 34 años y ocho meses de prisión, como implicados directos, mientras que otras cuatro recibieron una pena de 17 años de reclusión como cómplices en el linchamiento y asesinato de tres personas en la parroquia Posorja, provincia del Guayas.

Además, cada uno deberá pagar $ 15.000 como reparación integral para las familias de las víctimas, así como una multa de 500 salarios básico unificados (SBU) en el caso de los cómplices, y 1.000 SBU para los autores directos.

Roberto Malagón, abogado de las familias víctimas, se mostró complacido con la sentencia emitida por el Tribunal de Garantías Penales, pues aseguró que durante todo el proceso “se ha podido demostrar con pruebas físicas y documentales el grado de participación de cada implicado”.

Mientras que Christina Ochoa, defensora de José B., uno de los acusados, tildó de vergonzosa la sentencia, pues asegura que no se presentaron pruebas contundentes contra muchos de los procesados y, sin embargo, se les han impuesto penas excesivas.

“Vamos a apelar. Contra algunos de los detenidos existen testimonios, vídeos y fotos que los ligan como autores directos y se los ha procesado como cómplices, mientras que mi defendido, a quien solo un policía ha podido identificar como autor de desmanes, nunca lo vi agrediendo a nadie, lo han sentenciado a 34 años y ocho meses como autor material”.

En los exteriores de la Unidad Judicial Penal #2, ubicada en el centro comercial Albán Borja, decenas de familiares de los enjuiciados recibieron con pesar las noticia. Algunos rompieron en llanto al conocer la resolución del caso y debieron ser asistidos por sus parientes ante el peligro de desmayos.

“No fueron 11 ni 20, fueron 2.000 quienes participaron en el linchamiento. Por qué solo mi hijo va preso”, gritaba la madre de uno de los sentenciados a los servidores judiciales que se retiraban del edificio.

El 16 de octubre de 2018, una trifulca sacó a la fuerza de la Unidad de Policía Comunitaria de Posorja a tres personas que habían sido falsamente acusadas de conformar una banda de secuestradores de niños; las apedreó, golpeó y acuchilló hasta matarlas, luego intentó prenderles fuego, aunque finalmente la Policía lo evitó.

En total son 20 personas las que fueron vinculadas a este hecho. Aún está pendiente el juicio contra nueve de ellas que se encontraban prófugas de la justicia, una de las cuales ya logró ser ubicada y capturada hace dos semanas, por lo que ya espera fecha para su proceso. (I)