La Policía Nacional y la Intendencia General de Policía de Pichincha clausuraron un club nocturno donde presuntamente se expendían bebidas alcohólicas y se ofrecían servicios sexuales y sin los respectivos permisos.

En el inmueble intervenido, los funcionarios constataron además que el local habría funcionado en condiciones de insalubridad: cables eléctricos sueltos, colillas de cigarrillos, etc.

Según indicó el Ministerio del Interior, más de 12 trabajadoras sexuales y 50 individuos (clientes) mayores de edad fueron retirados del lugar luego de verificar sus documentos personales.

Por otro lado, una ciudadana de nacionalidad colombiana quedó a órdenes de autoridades de Migración por no presentar su cédula de identidad.

El control se ejecutó el pasado viernes, a lo largo de la avenida 10 de Agosto, al norte de Quito. El intendente general de Policía, Edwin Castelo, indicó que en esta jornada se verificaron que los establecimientos de la zona cumplan con las disposiciones legales.

Además del club nocturno, otros 6 locales fueron clausurados no solo porque no presentaron los permisos de funcionamiento, sino también por haber registrado otras irregularidades como vender productos caducos y permitir que ciudadanos ingieran licor en la vía pública.

Al finalizar el operativo, el funcionario informó que se dejaron varias citaciones a sus propietarios por presunta infracción a las normas en la tenencia de locales de diversión.

“La Policía Nacional hace un trabajo de inteligencia y nos apoya en la puntualización de los lugares a ser intervenidos”, explicó Castelo.

El subteniente Germán Guerrero, jefe del Circuito Las Casas del Distrito de Policía Eugenio Espejo de Quito, reveló que junto a 10 clases y policías colaboraron con este procedimiento preventivo en el norte de la capital.