Develar las causas que motivaron el asesinato del fiscal Carlos Karolys Piedrahíta es una de las prioridades del equipo interagencial que investiga el hecho.

Así lo expresó el general Ramiro Ortega, comandante de la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón). Anunció que la Policía Judicial (PJ), Criminalística, la Dirección Nacional de Muertes Violentas (Dinased) y la Fiscalía ya trazaron un plan de acción.

Entre las primeras conclusiones se descartó el robo como el móvil, ya que ninguno objeto personal del occiso fue sustraído. “Se trata de un caso de violencia criminal”, dijo el oficial.

También indicó que se  determinó que fueron 14 los impactos de bala que recibió Karolys y su vehículo durante el atentado, de los cuales dos alcanzaron al funcionario y le provocaron la muerte.

La Fiscalía de Guayas llevará la investigación bajo reserva para no entorpecer el proceso. El agente Franklin Flores Catuto, de la Unidad Especializada de Personas y Garantías, liderará la instrucción fiscal.

Karolys fue reintegrado a la Fiscalía el 1 de junio de 2019, cinco años después (2014) de haber sido destituido por un error inexcusable en el ejercicio de sus funciones, por lo cual presentó una apelación que se resolvió a su favor.

Durante el período que estuvo fuera de la Fiscalía, defendió causas en el libre ejercicio profesional -algunas vinculadas con el tráfico de drogas-, por lo que se indaga si su asesinato estaría vinculado a un caso antiguo.

Por este motivo, personal de la Dinased se movilizó hasta su oficina, en Daule, para buscar indicios. Además, Criminalística realizó un peritaje a un teléfono celular encontrado en el vehículo de la víctima.

Sus familiares desconocen si el fiscal recibió amenazas los días previos a su muerte, aunque al ser muy reservado con su trabajo, no lo descartan.

Karolys fue asesinado bajo la modalidad de sicariato el 10 de julio, cuando se movilizaba en su carro desde Guayaquil hasta Daule, luego de una audiencia. (I)