Plantón por estudiante colombiana desaparecida
Han pasado 43 días desde la desaparición de Carolina Garzón, estudiante colombiana de 22 años. Los ciudadanos con quienes compartía una vivienda -cuatro jóvenes colombianos y dos argentinos- la vieron por última vez el pasado 28 de abril a las 14:00 en el barrio Paluco, sector del Trébol, al oriente de Quito.
En ese sector alquilaban una casa desde el 19 de marzo. Carolina les habría dicho a sus amigos que planeaba visitar un museo.
La denuncia fue presentada el 2 de mayo en la Fiscalía y se asignó a la fiscal Clara Aveiga y al cabo Freddy Anchaluisa para la investigación.
Walter Garzón, padre de Carolina, afirma que de la vivienda de su hija únicamente se tomaron algunas fotografías, más no posibles huellas de sus objetos personales.
El 5 de mayo miembros del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) iniciaron una búsqueda en los alrededores del río Machángara, sin obtener resultados.
Sin embargo, el 6 de mayo, el cabo Anchaluisa acudió al mismo lugar, encontrando una prenda de vestir de Carolina, que correspondía a un suéter en cuyo interior había una servilleta con un mensaje de uno de sus amigos.
Luego de unos días, familiares de Carolina recibieron una llamada de un hombre que podría haberla visto en el malecón de Guayaquil; amigos de la joven en esa ciudad se comunicaron con la persona, sin embargo la Policía no lo hizo.
En días anteriores la fiscal Aveiga fue removida del caso y en su lugar se colocó a Elba Garzón, quien el 7 de junio ordenó una nueva revisión de la vivienda y sectores aledaños.
Ayer en la tarde amigos y familiares realizaron un plantón en los exteriores del Estadio Olímpico Atahualpa, exigiendo que se tomen las acciones necesarias para encontrarla.