Moderno control en penal
El control de ingreso de visitas en el Centro de Rehabilitación Social de Varones (CRSV) de Guayaquil se cumple desde este mes con nuevas medidas de seguridad, para evitar el paso de objetos prohibidos.
Uno de los filtros de verificación habilitados en las instalaciones tiene un escáner destinado a identificar anomalías en el cuerpo de las personas. “Este equipo detecta, en un 99,9%, todo objeto que esté escondido o que no se puede ver normalmente”, explicó el coordinador de seguridad del recinto penitenciario, Carlos Vega.
Dijo que adquirir el equipo de rayos x, que tiene un costo aproximado de 150 mil dólares, ha permitido detectar droga en las partes íntimas de las mujeres. “En estos casos se comunica la anomalía a agentes de Antinarcóticos que hacen un parte para proceder a la detención”.
Detalló que no todos pasan por el control debido a que la demanda de visitas es considerable en los días permitidos. “Por cada diez personas, tres son sometidas al escaneo que dura cerca de cuarenta segundos de cada lado”.
No obstante, confirmó que para cumplir con una inspección general se cuenta con la ayuda de agentes policiales que se encargan de revisar a las visitas que ingresan.
Gran demanda de visitas
Según los registros del Ministerio de Justicia, los miércoles (día de visita conyugal) llega un promedio de 1.600 personas. Mientras que los sábados y domingos la cifra aumenta a 3.600 por día.
En el primer grupo se encuentra Carla Caicedo, quien llegó ayer a esas instalaciones con la cédula de identidad en su mano. Ella sabía que presentar ese documento es fundamental para ingresar al recinto carcelario, ya que forma parte de los requisitos exigidos para pasar uno de los filtros de seguridad.
Se trata de un punto en el que los técnicos constatan la verdadera identidad de la persona que porta el papel. “Las nuevas cédulas tienen un chip que permite comparar la huella digital del visitante con la grabada en el documento, así se constata si coincide”, aclaró Carlos Corral, analista de sistema del Ministerio de Justicia, quien detalló que al comprobar alguna irregularidad se procede a detener al implicado. “Este es un trabajo coordinado con la Policía, ya que se trata de un delito de suplantación de identidad”.
Cumplir este tipo de control no fue molestia para Noeli Guerra, quien consideró que era necesario implementar nuevos sistemas de seguridad, debido a que los visitantes son los que corren mayor riesgo en caso de que en el penal haya objetos prohibidos.
“Es la primera vez que vengo, pero tengo entendido que antes era horrible porque se entraba sin mayor control”, acotó.
De acuerdo a un reporte de la cartera de Estado, con el anterior proceso de verificación -los agentes policiales- se tardaban cerca de cinco minutos por cada persona debido a que los documentos de identidad eran revisados manualmente.
En la actualidad, el sistema se ha automatizado al punto que la revisión no tarda más de 10 segundos, tiempo en el que se hace la lectura digital de la cédula.
El Ministerio de Justicia invirtió cerca de un millón de dólares para adquirir los equipos.