Más de 4 mil personas privadas de libertad forman parte de programas de Educación General Básica
Hasta el 19 de junio, el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos presentará varios eventos para festejar a los internos de centros de rehabilitación social. La jornada inició el pasado 12 de junio que se celebra el Día de la Persona Privada de Libertad.
En la actualidad existen 30 Centros de privación de libertad, 11 Centros de Internamiento de Adolescentes Infractores, 17 Centros de Detención Provisional y 3 Casas de Confianza. En dichas dependencias se organizan actividades deportivas, recreativas y culturales para entretener a los internos.
Estos actos son parte del nuevo modelo de atención que garantiza la verdadera rehabilitación de los privados de libertad. A partir de la creación del Ministerio de Justicia, Derechos Humanos y Cultos, en 2007, se inició una transformación profunda del sistema penitenciario en el país.
Para ello se invirtieron más de $ 370 millones en readecuación y construcción de tres centros de rehabilitación social en Latacunga (Cotopaxi), Guayaquil (Guayas) y Turi (Azuay).
Otra de las acciones emprendidas fue la erradicación del hacinamiento en los centros penitenciarios, no solo a través de la remodelación en infraestructura, sino también mediante el despacho de causas pendientes con el apoyo de audiencias virtuales. Así se redujo el número de diligencias fallidas del 29 % en 2012, al 4 % en 2014.
La inserción laboral también es importante. Por ello se implementaron 80 talleres para capacitar a los internos en materias de metalmecánica, carpintería, textil, crianza, siembra, panadería, artesanal, serigrafía y señalética.
La atención médica también fue fundamental para garantizar la calidad de vida de los reclusos. A partir de junio de 2014, el Ministerio de Salud Pública (MSP) asumió la competencia para la provisión de servicios de salud.
En los centros de rehabilitación social regionales, se han efectuado más de 400 cirugías de baja y mediana complejidad, atendidos más de 30 mil consultas ambulatorias y se evitaron cerca de 3.500 traslados de personas privadas de libertad a clínicas y hospitales.
En todos los centros de rehabilitación social del país se han realizado más de 107 mil asistencias médicas de toda índole.
En cuanto a la educación, 753 personas privadas de libertad participan en procesos de alfabetización; 4.072 en forman parte de programas de Educación General Básica, y 807 cursan el Bachillerato.
Estas cifras denotan un incremento del 15% de personas privadas de libertad que acceden a la educación, en comparación al año 2013, detalló el Ministerio de Justicia.