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Más cerca del asesino de niños Logro

Más cerca del asesino de niños Logro
30 de noviembre de 2013 - 00:00

Las indagaciones para hallar al culpable de las muertes de Juana (7), Néstor (5) y Jordan (3) Logro llevaron a la Policía hasta un domicilio del sector de la Nueva Aurora, al sur de Quito, a pocas cuadras de la casa donde los menores asesinados residían junto a sus padres y otros 3 hermanos mayores.

El Fiscal Vicente Reinoso, quien está a la cabeza de las investigaciones, fue cauto al señalar que el allanamiento se hizo por indicios que hicieron presumir que el 20 de agosto pasado los pequeños acudieron hasta esa vivienda donde al parecer se produjo una reunión familiar. “No podemos dejar ningún cabo suelto”, manifestó.

El procedimiento judicial se realizó pasadas las 18:30 del jueves; un grupo de Criminalística desarrolló el operativo que incluyó pruebas con luminol en las habitaciones del lugar, con el fin de descubrir restos de fluidos como sangre.

La operación se extendió por cerca de 2 horas, luego de lo cual las autoridades abandonaron el sitio entre los reclamos de los residentes, molestos por la intervención.

La Fiscalía explicó que el allanamiento tuvo el fin de seguir todas las pistas para reconstruir las últimas horas que vivieron los pequeños antes de su desaparición.

El despliegue se efectuó un día después de que la familia Logro enterró los restos de Néstor y Jordan en el cementerio de la comuna Tambor Urco, a 15 kilómetros de Saquisilí, en Cotopaxi.

La osamenta de Jordan apareció el pasado 3 de octubre en una quebrada en el sur de Quito. Cuatro semanas después, el 31 de octubre, se hallaron los huesos de Néstor en un terreno baldío de Quitumbe.

El cadáver de la hermana mayor, Juana, fue localizado el 9 de septiembre en una caja de cartón arrojada en un terreno baldío de la ciudadela del Ejército, cerca de la misma zona. El cuerpo presentaba huellas de violencia sexual.

La familia indígena emigró al sur de Quito hace 7 años, en busca de trabajo. El padre, Jorge Logro, laboraba ocasionalmente como albañil y la madre, María Choloquinga, se dedicaba a cuidar a sus hijos.

Luego de la tragedia, el presidente Rafael Correa visitó a los progenitores y el Ministerio del Interior se hizo cargo de sus gastos hasta que por medio del MIES les adjudicaron una vivienda en el sector de Cutuglagua, en el sur de la ciudad.

Posteriormente Jorge Logro fue contratado por el Cuerpo de Ingenieros del Ejército para laborar en una cuadrilla de inspección técnica del oleoducto; ahora pide que la justicia capture a quien o quienes acabaron con la vida de los 3 pequeños. “El caso está muy enredado”, reconoció el fiscal Vicente Reinoso, pero dejó entrever que el asesino estaría más cerca de lo que se piensa y la próxima semana se harían otros allanamientos.

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