En Ecuador, Este crimen transnacional recluta víctimas en escuelas, colegios y redes sociales
Los delitos sexuales infantiles, con estructuras en toda Latinoamérica
Ecuador aprovechó el ‘I Simposio internacional frente a delitos sexuales infantiles con énfasis en turismo y pornografía’, que se realizó el miércoles y ayer en Quito, para poner sobre el tapete de los representantes de las policías de la región un secreto a voces: los delitos sexuales infantiles son un tema complejo que tiene estructuras en toda Latinoamérica, lo que hace necesario el trabajo en conjunto para erradicarlos.
El país encendió las alertas luego de que, hace 4 meses y gracias al trabajo investigativo que tomó un año, descubrió que operaba una red internacional que entre 2013 y 2014 reclutó a 120 niñas y adolescentes y las llevó a una nación de América del Sur para someterlas a explotación sexual y pornografía infantil.
La actuación de los miembros de la banda consistía en acudir a escuelas y colegios para reclutar a menores de entre 12 y 18 años de edad, enamorándolas o generándoles falsas expectativas para sacarlas ilegalmente del país a través de las fronteras.
Las 120 menores fueron reclutadas en zonas rurales de Ecuador. De ellas, solo 15 fueron rescatadas en un país del sur del Continente, mientras que las otras no, porque el operativo que se efectuó hace 4 meses falló, ya que se filtró información en la nación receptora, lo que alertó a los delincuentes. Pese a todo, se detuvo a 20 personas. Las menores rescatadas ya están ahora con sus respectivas familias.
La banda operaba en el país a través de la organización criminal ‘Punto 40’, la cual ya fue desarticulada en Ecuador. Sin embargo, se requiere de mayor implicación, colaboración y coordinación del resto de policías de la región para desbaratar esta y otras redes.
En este caso, la Policía Nacional logró identificar e iniciar las investigaciones a partir del decomiso de armas ilegales que tenía esta banda en Santo Domingo. Gracias a ello se determinó cómo operaba dicha red.
A decir del ministro del Interior, José Serrano, los delitos sexuales infantiles no se pueden visibilizar como ocurre con el robo a personas, a domicilios, el homicidio y el asesinato, sino que es un delito al cual hay que poner mucha atención porque se trata de redes estructuradas alrededor de países como Perú, Argentina, Bolivia, Colombia, Panamá, Guatemala, entre otros.
En 2014 y lo que vamos de 2015, la Policía ecuatoriana indicó que ha logrado desarticular en el territorio nacional 7 de esas bandas de explotación sexual y de tráfico de personas para pornografía infantil. Operaban en Santo Domingo de los Tsáchilas, Guayas y El Oro.
Sin embargo, lo fundamental no solo es el trabajo que haga la Policía ecuatoriana, sino sus similares de Latinoamérica: si no se involucran desde la misma perspectiva que en Ecuador, se dice que muy poco se podrá hacer y de nada servirá en el país desarticular esas bandas.
“La idea de este simposio internacional es determinar cómo logramos hacer una coordinación con las policías de los otros países, para erradicar la práctica ilícita de la explotación sexual infantil, de los delitos sexuales y la pornografía infantil, en donde el tema de las redes sociales también es muy complejo que en algún momento también habrá que ponerlo sobre la mesa de discusión”, destacó Serrano.
En ese sentido, Denis Apaza, oficial investigador de la División Antitrata de la Policía Boliviana, quien participó del Simposio, señaló que están al tanto del tema y a la espera de poder coordinar con todas las instituciones similares de la región, para hacer una lucha integral contra este fenómeno que en realidad trasciende constantemente fronteras.
Manifestó que la lucha conjunta es importante por tratarse de uno de los delitos más atroces. En Bolivia -según dijo- se han dado casos de pornografía, incluso, a través de las redes sociales, ya sea para distribuir ese material o captar víctimas.
Admitió que lo importante en esta lucha es la coordinación internacional, ya que es un delito que trasciende fronteras.
Para el coronel Henry Quintero, jefe de la Policía de la Infancia y Adolescencia de Colombia, este tipo de eventos internacionales al que acuden representantes de las policías de varios países, son importantes porque permiten afianzar y potenciar los lazos de cooperación.
Señaló que se ha observado un crecimiento de este delito y conductas criminales en Colombia y en varios países de la región.
De allí la importancia de generar estrategias que permitan contrarrestar de manera efectiva este fenómeno que genera ‘repudio’ porque tiene como víctimas los niños.
La clave para llevar a un mejor nivel esta lucha estaría en compartir las experiencias exitosas que tienen los países de la región y de otros continentes. En el Simposio se habló de lo crucial de fortalecer los lazos y las capacidades, incluso, entre organismos como la Comunidad de Policías de América (Ameripol), la Europol y la Interpol. (I)