La tecnología instalada en los laboratorios de Criminalística y Ciencias Forenses de la Policía, en Quito, es la más moderna en lo que se refiere a equipos y protocolos investigativos. Se utilizará en el análisis de las evidencias recogidas por los investigadores policiales en la escena del crimen, lo que convierte al complejo científico en el más grande de la región.

Uno de los objetivos es reducir el tiempo de respuesta y mejorar la capacidad técnica de la Policía Judicial para apoyar la investigación que tiene que dirigir el fiscal.

Al respecto, el comandante de la Policía, Gral. Rodrigo Suárez, señaló durante la inauguración del edificio de 7 pisos, donde funcionan 21 laboratorios, que ahora la institución cuenta con esta herramienta de última tecnología, la cual ayudará a que las conclusiones de las pruebas recogidas luego del cometimiento de algún delito, sean contundentes. “Será un aporte determinante para que jueces y fiscales cuenten con pruebas científicas a la hora de impartir justicia”, indicó el oficial.

El subdirector de la Policía técnico-científica, coronel Roberto Moreno, manifestó que la esencia misma de la gestión pericial parte de las “coordinaciones y pedidos que realiza la Fiscalía en sus diferentes casos; vamos a trabajar en el marco de la ley y los códigos y reglamentos para el accionar de las funciones que tendremos; nuestro trabajo tiene su esencia en el análisis de indicios que serán analizados por especialistas”.

En general, los operadores de justicia se verán fortalecidos por las metodologías que se aplican al tratamiento de los indicios que posteriormente se convertirán en evidencia, la cual “sustentada por el fiscal, pueda ser presentada en la etapa del juicio como prueba, una vez que haya sido valorada por el Tribunal de Garantías Penales o por los magistrados que lo componen”, aseveró Moreno.

En el complejo funciona también el más completo laboratorio de ADN, que contará con expertos forenses especializados en análisis de ADN mitocondrial. La antropóloga y bióloga Nancy Sáenz explicó que en el Ecuador no existía este tipo de estudios a nivel forense: “Vamos a trabajar en este campo de investigación, que ayuda en casos donde se hayan agitado las pruebas o la muestra de células esté muy degradada”.

En el nuevo edificio, ubicado sobre la avenida Mariana de Jesús, en el norte de Quito, ya están trabajando cerca de 340 expertos en las diferentes áreas que conforman la sección científica, donde están adecuados los laboratorios de Inspección Ocular Técnica, Audio Video, Fotografía Pericial, Dibujo y Planimetría, Identidad Física Humana, Registro de detenidos, Balística, Biología, Centro de acopio y conservación de elementos materiales, Química analítica, Toxicología analítica, Física, Documentología, Identificación de grabados y marcas seriales, Análisis informático y telecomunicaciones, Incendios y explosivos, Microscopía electrónica de barrido y el Laboratorio de Análisis de Propiedad Intelectual. Además, el Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) funciona también en el nuevo edificio.

Todos los departamentos cuentan con personal especializado y con aparatos modernos adquiridos en diferentes países, como el Laboratorio de Análisis de Vestigios, que cuenta con la tecnología para identificar partículas, lo cual permitirá, a través del software utilizado, ampliar la imagen de un rastro, como por ejemplo un pedazo de tela, hasta 500 veces, lo cual será determinante en la búsqueda de evidencias.

El presidente del Consejo de la Judicatura, Gustavo Jalkh, indicó que estos laboratorios sin lugar a dudas aportarán cualitativamente para clarificar la verdad de los acontecimientos e incluso adelantó que buscará firmar un convenio para que el laboratorio de ADN de la Policía también pueda ayudar en los casos de paternidad que se denuncian en la Fiscalía.

El ministro del Interior, José Serrano, reveló que se han invertido 11 millones de dólares en la construcción e implementación de estos modernos laboratorios, además de la adquisición de la tecnología para su funcionamiento.

Aseguró que esta es una herramienta fundamental para que “nunca más nuestros agentes usen la subjetividad y a partir de esto, incluso puedan vulnerar informes que podían ser manipulables; ahora se erradicarán definitivamente todas esas prácticas”.

También se refirió a la incorporación y entrenamiento de agentes civiles investigadores, para lo cual contratarán a 10 expertos que vendrán al país para capacitar al personal. Las bases de la convocatoria se realizarán una vez se apruebe el nuevo Código Integral Penal y el nuevo Código de Entidades de Seguridad.