La autora intelectual del secuestro, tortura y asesinato de una menor de edad regresará a prisión en 13 días. En menos de dos semanas se cumplirán los 90 días de permiso que se le otorgó a Guadalupe Soledad Riera, de 25 años, por su estado de embarazo. Ella fue encontrada culpable del asesinato premeditado de Damaris Cabrera, de 15 años, hecho ocurrido el 25 de mayo de 2011.

Su novio Edison Coronel, alias “Montana”, fue declarado inocente, mientras que el tercer procesado Xavier Vivas, alias el “Puma”, fue encontrado culpable bajo el cargo de encubridor y afrontará una pena no mayor a dos años.  

Riera se embarazó en la cárcel mientras esperaba su juzgamiento, que ocurrió la semana pasada. A pesar de ser señalada como la mentalizadora del atroz crimen durante el juicio, una de las autoras materiales, Jéssica Tatiana Sarzosa, alias “La Gata”, quien en ese momento era menor de edad, relató cada paso del secuestro, tortura y posterior asesinato.

Según los miembros del Tribunal que conducían el caso, la frialdad con la que se relató lo acontecido muestra una mente criminal en potencia. Por más de una hora, “La Gata” miraba fijamente a los ojos del padre de Damaris (menor asesinada) y contó cómo la llevaron con engaños al apartamento de “Montana”, quien estaba fuera de la ciudad.

Durante cuatro horas, y guiada por los celos, “La Gata” y otros dos menores, obligaron a Damaris que tomara cloro, orina y desinfectante. “La golpeamos en la cabeza y el cuerpo con un palo, luego le rompí una botella de vidrio en la cabeza”. Sin inmutarse, la joven narró que con un cuchillo le hicieron varios cortes en el cuerpo. “Yo la apuñalé y la quise abrir por la mitad”. 

Sin embargo, se ensañaron con el cuerpo, incluso intentaron cortarla por la mitad. “Por la herida de la puñalada, quisimos abrirla para separar en dos partes el cuerpo, pero no pudimos”. Estas son las palabras de la joven de cabello negro, ojos verdes y piel blanca.  

Al no poder desmembrarla, la introdujeron en un costal y la arrojaron en una quebrada de Chillogallo, al sur de Quito. El informe de autopsia reveló los múltiples traumas que Damaris soportó mientras estaba viva, y varias heridas realizadas post mórtem.

En los dos días de audiencia, la defensa de Guadalupe Riera, autora intelectual, se basó en que “La Gata” fue quien por celos asesinó a la joven, y que ella en compañía de uno de sus hijos aún en brazos, únicamente, presenció la tortura y asesinato, pero no participó materialmente.

Sin  embargo, cuando el hecho ocurrió, “La Gata”  tenía 17 años, por lo que fue juzgada en un Tribunal de Menores  y se le aplicó una pena de 4 años, que cumple en el Centro de Rehabilitación Virgilio Guerrero, al igual que los otros dos menores que también participaron.

“La Gata”, quien saldrá libre en 2016, a los 22 años, presentó su testimonio para confirmar la participación de Riera,  quien será sentenciada a una pena no menor a 16 años.

La Fiscalía estableció que tanto Guadalupe Riera, Jéssica Sarzosa y la víctima Damaris Cabrera  mantenían relaciones sentimentales con alias “Montana”, quien era reclutador de una banda delincuencial integrada por menores de edad. El brutal crimen ocurrió luego de que las mujeres hallaron una carta entre Damaris y “Montana”.  Luego del crimen, los menores limpiaron la sangre del lugar y se retiraron.