La familia de Edison Cosíos lleva un año tratando de hacer justicia
Encadenada al cerramiento del colegio Mejía, al norte de Quito, Vilma Pineda, madre del estudiante Edison Cosíos, quien fue herido en una protesta el 15 de septiembre de 2011, reclamó celeridad en el juzgamiento del teniente Hernán Salazar, identificado como el responsable del disparo que dejó al joven, ahora de 18 años, en estado vegetativo.
El pasado marzo, el Juzgado Cuarto de Garantías Penales de Pichincha llamó a juicio al policía acusado de tentativa de asesinato. Sin embargo, la defensa presentó dos recursos de nulidad en las cortes Provincial y Constitucional de Justicia, lo que ha prolongado la fecha de juzgamiento.
Manuel Cosíos, padre del alumno, indica que su hijo sufre una infección traqueal y que existe burocracia en el Ministerio de Salud, pues hace 15 días no recibe la medicación que requiere. “Es una agonía constante, pero mientras Dios me dé fuerza, voy a seguir”, dijo el progenitor.