Juez dictó prisión preventiva contra la mujer que castigó a su hija
Aquiles Dávila, juez de Garantías Penales con competencias en delitos flagrantes, dictó prisión preventiva contra la mujer que castigó con un látigo a su hija, de 9 años, y luego supuestamente la quemó con agua caliente.
El fiscal de turno, Geancarlos Almeida, durante la audiencia de formulación de cargos, realizada ayer en la Unidad Penal Norte, inició la instrucción fiscal por el delito de violencia física contra la mujer o miembros del núcleo familiar, tipificado en el artículo 156 del Código Orgánico Integral Penal (COIP).
La referida norma legal menciona que “la persona que, como manifestación de violencia contra la mujer o miembros del núcleo familiar, cause lesiones, será sancionada con las mismas penas previstas en el artículo 152 de lesiones, aumentadas en un tercio”.
En este caso particular, según el fiscal Almeida, el perito médico de la Fiscalía determinó que la niña presentaba quemaduras de segundo grado en su antebrazo izquierdo, lo cual le producía una incapacidad de 15 días “y por lo tanto, según el artículo 152, la madre de la niña enfrentaría una pena de dos meses y 15 días a un año y cuatro meses de pena privativa de libertad”.
El fiscal explicó que el caso será resuelto en 10 días mediante una audiencia de procedimiento directo, tal como lo determina el COIP para “los delitos calificados como flagrantes sancionados con pena máxima privativa de libertad de hasta cinco años”.
Durante la diligencia, que se instaló a las 10:00, la mujer aceptó que castigó a la pequeña con un látigo porque la culpaba del extravío de su tarjeta del sistema de transporte Metrovía.
Sin embargo, la acusada negó ser la autora de las quemaduras y en su defensa explicó que la niña sufrió las quemaduras en la cocina cuando manipulaba una olla con agua caliente, en la cual había puesto a hervir unos huevos para el desayuno del jueves cuando ocurrieron los hechos.
La menor, según la Fiscalía, fue entregada a una de sus tías paternas, hasta que se resuelva la situación de su madre.
Sin embargo, el cabo Mauricio Velasco, miembro de la Dirección Nacional de Policía Especializada en Niños, Niñas y Adolescentes (Dinapen), informó que durante la entrevista a la menor culpó a su progenitora de las quemaduras que sufrió ese día.
Velasco detalló que la niña fue enviada a la escuela como si nada hubiese pasado, pero la maestra de la menor observó un comportamiento inusual en ella y le preguntó qué le sucedía.
Ante esto, la profesora descubrió que la niña tenía quemaduras en uno de sus brazos y la trasladó al hospital León Becerra, donde la doctora que la trató llamó a los agentes de la Dinapen.
Una hora después, la madre de la niña fue detenida en su lugar de trabajo y conducida a la Unidad de Flagrancia de la Fiscalía en el centro comercial Albán Borja. En el lugar, la aprehendida, molesta por su situación legal, arremetió contra la prensa que intentaba conseguir su versión de los hechos.
En la unidad educativa donde estudia la pequeña y una de sus hermanas, de 12 años, ubicada en el sector del barrio Centenario, ningún directivo se pronunció sobre este particular. (I)
