Tras la muerte de Emilia, Víctor Araus, jefe de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida y Muertes Violentas, anunció que se retomará la investigación de la desaparición de María Conde, en Loja. De ella no se tienen noticias desde enero de 2014, cuando tenía siete años. La madre de la niña ha viajado hasta Perú con el objetivo de encontrar a su hija.

Ramiro Mantilla, comandante general de la Policía Nacional, informó que no puede adelantarse si la misma agrupación que terminó con la vida de Emilia estaría involucrada en el caso, pero que la investigación determinará si los individuos recién empezaban a delinquir o si ya habían otras víctimas. Además de si hay otros implicados dentro y fuera de Loja. “Estamos revisando denuncias de delitos sexuales y desapariciones”.

El oficial mencionó que la revisión de los aparatos electrónicos que tenían los sospechosos será clave para verificar si se dedicaban a la pornografía infantil.

Adicionalmente, indicó que 104 funcionarios de la Dirección Nacional de Policía Especializada en Niños, Niñas y Adolescentes (Dinapen) son capacitados para prevenir temas relacionados a delitos sexuales.

Anunció que al grupo lúdico se sumará un títere policía de nombre ‘Paquita’. Así se pretende educar a las niñas respecto a cómo actuar cuando una persona desconocida o cercana a la familia le haga propuestas inadecuadas o quiera tocarle sus partes íntimas. “Deben saber que nadie, así sea amigo, puede llevárselas a ningún lugar sin antes hablar con sus padres”.

Además precisó que los padres deben darle la confianza a los niños para que puedan contar qué les sucede.

“Muchas veces por temor a que los reprendan se quedan en silencio, pues piensan que hicieron algo malo cuando realmente son las víctimas”. Destacó también que muchas veces el exceso de confianza aumenta la vulnerabilidad de los niños.

De acuerdo con información de la Fiscalía General del Estado (FGE) y del Ministerio del Interior se investigan 1.511 casos de personas desaparecidas desde 2014 hasta 2017. (I)