Exdirector de psiquiátrico denuncia irregularidades
Un nuevo caso de corrupción en el sistema de salud se investiga en tiempos de pandemia en Ecuador. Esta vez en el hospital psiquiátrico Julio Endara, en Conocoto, sur Quito.
Esteban Bonilla, exdirector médico del centro, denunció presuntas irregularidades en contratos para la adquisición de mascarillas N-95 y gel antibacterial.
El denunciante se negó a firmar un contrato por $ 8.000 para comprar cubrebocas y a través de correos electrónicos explicó su decisión por no estar de acuerdo con el precio, por incumplimiento de normas de calidad y falta de informes.
El 27 de mayo, la gerenta del hospital, Martha Gordón, lo destituyó de su cargo y lo designó a la Dirección de Docencia e investigación.
Milton Román, su abogado, indicó que la denuncia fue asentada y los documentos con las evidencias fueron enviados personalmente al correo de la fiscal general del Estado, Diana Salazar.
Explicó que personal del hospital pretendía adquirir mascarillas con sobreprecio, sin certificación de calidad.
Además, el adjudicatario del contrato habría sido el hermano de una funcionaria administrativa del hospital
Enfatizó que se realizó una compra de gel antibacterial cuyo número de registro sanitario no constaba en la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa). Esto sumado a que las botellas tenían una etiqueta pegada con cinta adhesiva.
El doctor Bonilla notificó la novedad y el 25 de mayo recibió una respuesta con una carta firmada por la propietaria de la empresa proveedora.
“Efectivamente existió un error en el número de notificación sanitaria, en el momento de cambiar el diseño (...) debido a la emergencia sanitaria las etiquetas fueron impresas de manera provisional”, consta en un documento.
“Luego comenzó una persecución en contra del doctor Bonilla y quienes lo apoyan. La pregunta es: ¿Por qué lo destituyeron y ubicaron en un puesto sin jerarquía de mando?”, recalcó el abogado Román.
Asimismo dijo que detectaron que antes de la emergencia hubo otras compras aparentemente irregulares.
Diario El TELÉGRAFO, la mañana de ayer, intentó comunicarse con el doctor Esteban Bonilla y con la gerenta del hospital, pero no hubo respuesta. (I)