Un año y cuatro meses después de que los cuerpos de Carlos Humberto Llanos (38 años), de su esposa Silvia Parco Valverde (30) y de su hijo (3 años) fueran hallados flotando en el río Umbe, en el cantón Quinsaloma (Los Ríos), la Sala Penal de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) encontró culpables a cuatro de los seis procesados por el triple crimen.

La incertidumbre de los involucrados concluyó a la medianoche del viernes, tras una semana de escuchar testimonios y acusaciones, con el dictamen del presidente de esa judicatura, Vicente Robalino, quien declaró la culpabilidad de Carolina Llanos Avendaño como autora intelectual de los asesinatos y de José Manuel Véliz Sánchez, Juan Fernando Rodríguez Lavayen y Edgar Eduardo Martínez Franco como los autores materiales.

Al mismo tiempo, el magistrado declaró inocente al asambleísta de Sociedad Patriótica (PSP), Galo Lara Yépez, como presunto autor intelectual. De igual manera, a su asesor Luis Mediavilla Paredes, pues la Fiscalía se abstuvo de acusarlo como encubridor por falta de pruebas.

En medio de las lágrimas -tanto de los familiares de las víctimas como de los procesados- los guías penitenciarios esposaron a los sentenciados y los sacaron de la sala con fuerte resguardo policial.

Durante el proceso, más de 50 personas rindieron su testimonio y varios coincidieron en que Carolina Llanos amenazó de muerte en reiteradas ocasiones a Carlos Llanos aparentemente por celos, pues mantuvieron una relación sentimental a pesar de ser primos. Él sería el padre de la primera hija de la sentenciada, quien además es la pareja sentimental de Lara.

La indagación previa se abrió en agosto de 2011 y cuatro meses después fueron detenidos José Manuel Véliz y Edgar Martínez, lo que dio paso a la instrucción fiscal.

En enero pasado, los detenidos vincularon a Carolina Llanos y fue detenida un día después y, enseguida, se le realizó la audiencia de formulación de cargos. Pasaron ocho días y fue capturado Juan Fernando Rodríguez Lavayen por implicación en el hecho.

En marzo pasado se conoció el video en el que uno de los procesados vinculó a Lara como la persona que supuestamente facilitó el dinero para pagar las muertes, prueba que la Fiscalía utilizó para relacionarlo al proceso. 

En mayo, Gilbert Llanos, hermano de la acusada, también fue vinculado y como prueba se presentaron los movimientos bancarios que hizo días antes y después del crimen.

La audiencia de juzgamiento fue señalada para el 10 de diciembre, sin embargo, Lara no asistió en dos ocasiones a la diligencia y el juez ordenó que la fuerza pública se encargara de llevarlo a la comparecencia.

Durante una semana, la Sala de la CNJ estuvo llena de familiares y la Fiscalía presentó videos, análisis grafológicos, triangulación de llamadas entre los procesados y manejo de altas sumas de dinero, pero obvió la prueba de ADN para confirmar al autor de la violación a Silvia Parco (víctima), pues la perito encargada no logró realizar el examen criminalístico en el plazo fijado.

Concluido el juicio, el fiscal General del Estado, Galo Chiriboga, dijo que la entidad trabajó lealmente en el caso: “nosotros acusamos, llevamos pruebas, pero si la Fiscalía no logró demostrar el nexo causal en relación a Lara, no es una derrota, es un avance para la justicia”.

Chiriboga manifestó que cuando la Fiscalía no gana el caso, demuestra que hay independencia. “Nos dieron la razón con cuatro procesados, para nosotros el caso acabó aquí”, expresó el funcionario.

El abogado de Llanos, Juan Vizueta, en cambio indicó que interpondrán las apelaciones necesarias que otorga la ley, incluso a organismos internacionales.

Se espera que en enero los jueces notifiquen los años de prisión para los procesados de acuerdo a su grado de participación. La pena máxima sería 25 años de reclusión. Mientras tanto, permanecerán recluidos en las cárceles de Guayaquil, donde se encuentran desde hace un año.