El juez Jaime Vayas instaló la mañana de este viernes la audiencia por la muerte de Amada Suárez Mejía, ocurrida el 16 de enero de 1992, durante un allanamiento policial realizado en su domicilio.

A la diligencia, que se realizó en la Casa de Justicia de Carcelén, asistió el fiscal general de la Nación, Galo Chiriboga.

En la audiencia la fiscal Paola Gallardo formuló cargos contra 5 policías activos y pasivos por presunta ejecución extrajudicial en este caso.

Tras analizar los documentos presentados tanto por la defensa como por la Fiscalía, el juez dictó medidas sustitutivas para los procesados, quienes deberán presentarse ante la autoridad competente cada 8 días, no podrán vender sus bienes y acciones, y tampoco podrán salir del país.

Se trata del séptimo caso que se judicializa con base en las investigaciones de la Dirección de la Comisión de la Verdad y Derechos Humanos de la Fiscalía.

Amada Suárez Mejía, madre  adoptiva de Juan Fernando Hermosa, de 16 años, quien fue conocido como el Niño del terror, habría sido ejecutada extrajudicialmente en el operativo realizado por los integrantes de la Policía Nacional para capturar a su hijo.

Según el relato que consta en el Informe de la Comisión de Verdad, conformada por la Presidencia de la República en  2007, el joven era conocido como el líder de la Pandilla del Terror conformada, entre otros, por chicos menores de 18 años.

La Pandilla sería la responsable de la muerte de varios ciudadanos, entre taxistas y homosexuales, cometidos entre noviembre de 1991 y enero de 1992.

Cuando la Policía Nacional obtuvo la información del domicilio de Juan Fernando Hermosa tramitó una orden de allanamiento. Durante ese operativo Amada Suárez murió y el adolescente fue capturado ileso.

La causa forma parte de los 136 casos referentes a graves violaciones a los derechos humanos y crímenes de lesa humanidad, sucedidos entre 1989 y 2008,  que investiga el Ministerio Público. (I)