Ingenio, agilidad felina y una caña fueron las únicas herramientas que los delincuentes necesitaron para llegar a un departamento, ubicado en el segundo piso de un edificio en las calles Boyacá y Juan Montalvo, en el centro de Guayaquil.

La víctima recordó que ya era de madrugada cuando un ruido llamó su atención y al buscar el origen se halló con la sorpresa de que en su vivienda entraron los ladrones.

En este caso los antisociales utilizaron una caña para trepar hasta alcanzar el balcón de la vivienda y perpetrar el acto ilícito.

“María”, quien trabaja en la guardianía y limpieza del edificio, comentó que este método de robo se está volviendo más frecuente en el sector. “Es la segunda vez que ocurre a una vivienda del sitio, al menos que yo me haya enterado”.

Mencionó que los ladrones aprovechan la cercanía con las faldas de los cerros Santa Ana y El Carmen para asaltar y perderse fácilmente. “Roban, suben al cerro o se meten al túnel y desaparecen”.

Presentarse como empleados públicos, policías o vendedores es otra modalidad que utilizan los antisociales para ingresar en las casas.

El 29 de enero de este año,  en la ciudadela Sauces IX, al norte de la ciudad, dos ladrones, quienes ofrecían el servicio de fumigación contra vectores, entraron a un domicilio de donde sustrajeron un teléfono celular.

Según datos referenciales de la Policía Judicial, 1.964 casos de robos a domicilios se registraron en 2018, y 162 en enero de 2019.

Prevención de este delito
El coronel Galo Erazo, jefe de la Policía Judicial de la Zona 8, indicó que para evitar este tipo de delitos se deben tomar precauciones.

La primera recomendación, sobre todo en feriados, es aprovechar el portafolio de servicios que tiene la Policía.

Uno de ellos es el “encargo de domicilio”, en el cual se informa a la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) más cercana que la vivienda va a quedar desatendida por un tiempo prolongado.

Así, los servidores policiales toman medidas de seguridad como patrullaje por el vecindario y estan pendientes de actividades sospechosas.

También pueden activar el botón de seguridad. “Se registran los datos de la vivienda en el UPC más cercano y si existe actividad irregular se marca un número desde el celular y la policía se acerca a la casa a verificar la novedad”, explicó Erazo.

Además, la Policía recomienda organizarse y crear un chat comunitario con los agentes que laboran en el sector para mantenerlos al tanto de cualquier novedad.

Tecnología minimiza robos
Otra forma de prevenir el robo a domicilios es con la instalación del sistema de seguridad avanzada.

Freddy Torres, experto en seguridad electrónica, explicó que la instalación de cámaras de seguridad y sistemas de alarma ayuda al objetivo.

Indicó que la presencia de cámaras es disuasiva para los asaltantes.

“Si los ladrones se percatan de estos sistemas hay probabilidades de que desistan de perpetrar el robo”.

Añadió que existen sistemas con sensores de movimiento, los cuales emiten una alerta y activan las cámaras de seguridad que pueden ser monitoreadas desde el teléfono y alertar a las autoridades en caso de que se perpetrara un asalto. (I)