El tiempo de delinquir terminó para 282 personas que pertenecían a 49 bandas que operaban en el país. Por los delitos que cometieron hoy son procesadas y, posteriormente, serán juzgadas.

Para lograr estos resultados, la Policía emprendió operativos policiales a los que denominó Eslabón, y hasta este mes van 20, en los que ha conseguido el objetivo de limpiar las calles de delincuentes.

El primer eslabón se lo realizó en septiembre de 2014, en operativos ejecutados en 6 provincias, Pichincha, Santo Domingo de los Tsáchilas, Los Ríos, Guayas, Azuay y El Oro.  En esa oportunidad, las fuerzas de élite de la Policía Nacional  desarticularon a 6 bandas delictivas dedicadas al robo de vehículos, locales comerciales, secuestro exprés y extorsión.

Las órdenes desde la cárcel

En el último Eslabón XX, la Policía descubrió que desde la cárcel operaba una banda de extorsionadores, compuesta por privados de la libertad con complicidad de otras personas que operaban en las provincias de Manabí, Los Ríos y Guayas.

Según las investigaciones, los privados de la libertad tomaban el  nombre de fiscales y jueces del cantón Quevedo, en Los Ríos.

Luego realizaban llamadas a familiares de los reclusos para exigirles dinero, a cambio de una supuesta liberación.

La red de extorsionadores funcionaba desde el interior del CRS de Quevedo y estaría coordinada por el preso conocido como ‘El Guayaco’, quien al parecer se tomaba los nombres de los funcionarios judiciales para el delito.  

Jorge Ballesteros, fiscal provincial de Los Ríos, señaló que los recientes casos se unen a otros ya resueltos en la ciudad de Valencia.

Confirmó que ya se presentaron cargos por el delito de extorsión y estafa a las seis personas detenidas. Los tres restantes internos fueron juzgados, recibiendo la extensión de sus penas, mediante procedimiento abreviado.   

Manabí  

La otra banda se dedicaba al robo de vehículos en Manabí y, también, extorsionaba a las víctimas.

Los integrantes realizaban estudios previos de los vehículos, como camionetas marca Mazda, Jeeps, Hyundai Tucson y Kia Sportage. Los automotores eran sustraídos, la mayoría, cuando estaban estacionados afuera de los domicilios.

Las primeras investigaciones policiales establecieron que esta agrupación operaba en los cantones de Jipijapa, Manta y Portoviejo, en Manabí.

El cabecilla era Jhonny M.M., quien se encuentra privado de la libertad por el delito de asesinato en el Centro de Rehabilitación Social (CRS),de Jipijapa, y dirigía las operaciones delictivas desde el interior del sitio. “Un grupo  estaría robando vehículos para luego llamar y extorsionar a los dueños, exigiéndoles de $ 2.000 a $5.000 para devolverlos, dependiendo del valor y modelo, amenazándolos con destruirlos e incendiarlos en público”, comunicó Diego Fuentes, viceministro del Interior, quien agregó que en el Eslabón XXparticiparon de manera simultánea 105 agentes.

Meta policial

Fausto Tamayo, comandante general de la Policía Nacional, afirmó que la entidad hizo un análisis de las denuncias de robo de vehículos, que sumaban 350.  

Los operativos Eslabón surgieron como una meta del Ministerio del Interior y la Policía Nacional de realizar actividades antidelictivas a escala, obteniendo información previa para la ejecución de operativos y   desarticulación de bandas del crimen organizado.