Los vendedores ambulantes de las afueras de los colegios de Guayaquil quieren ser parte de la lucha contra el microtráfico de drogas, un mal que afecta a los estudiantes de diversos planteles a nivel del país.

La Federación de Trabajadores Autónomos busca que sus agremiados no sean vinculados con la comercialización de droga en los exteriores de los centros educativos y para este objeto propone uniformarse y portar credenciales.     

En las investigaciones policiales que se realizan periódicamente en las afueras de los colegios, se ha determinado que,  con el fin de distribuir los estupefacientes, varios expendedores de droga se hacían pasar por vendedores de productos, como pasteles, mangos, prensados y artículos varios.

Wladimir León, jefe de la Unidad de Antinarcóticos del Guayas, afirma que la lucha contra el microtráfico no solo depende de la Policía Nacional, sino también de la unión de padres de familia y profesores.

“Las drogas no son de ahora, no es que  aparecieron este año; siempre ha existido este problema”
Tnte. Crnel. Wladimir León
Jefe de Antinarcóticos en GuayasA finales del año lectivo anterior (2012-2013), el Ministerio del Interior, en conjunto con la Policía Nacional, lanzó el programa “Yo vivo mi colegio preventivo”, con el que se busca erradicar la drogadicción de los jóvenes a través de capacitaciones a los padres y docentes, así como también con diversas charlas a los estudiantes.

“Dentro de la lucha de la Dirección Nacional de Antinarcóticos contra el microtráfico en los colegios, tenemos la parte que es el control de los expendedores, pero paralelamente estamos trabajando en el área preventiva”, indica el teniente coronel de la Policía.

Para ampliar la lucha contra la venta de drogas en los planteles educativos y sus alrededores, en mayo pasado se presentó el programa con un nuevo componente: “Yo vivo mi colegio preventivo, tú decides”.

A diferencia del primer plan, este trata más con los alumnos que con los padres y profesores. “La parte preventiva busca enseñarles a los estudiantes las formas que usan los expendedores para hacerlos caer en las drogas. Se hace talleres con los alumnos, se les da guías y tips para que ellos decidan qué hacer, porque a fin de cuentas se les puede dar consejos y un buen ejemplo, pero son ellos quienes deciden”, asevera León.

En caso de que un alumno sea encontrado con drogas al interior de un centro educativo, es llevado de inmediato a la Fiscalía de Flagrancias (en el Cuartel Modelo) y luego se realiza una audiencia, en la que intervienen, además, la Dinapen (Dirección Nacional de Policía Especializada para niños, niñas y adolescentes ) y Antinarcóticos.

El personal policiaco determina si la sustancia que porta el menor es droga y de qué clase es, y luego de esto las autoridades determinan qué medida socio-educativa le impondrán al adolescente infractor.

León comenta que el tema del microtráfico no es nuevo. El uniformado da las razones del porqué en la actualidad pareciese que el problema de las drogas ha tomado más fuerza. “Las drogas no son de ahora, no es que recién aparecieron este año, siempre ha existido este problema”, dice León.

“Lo que sucede es que ahora hay más denuncias. Antes, los alumnos y profesores no denunciaban por temor. Ahora tenemos una parte judicial efectiva y entonces se sienten respaldados, por eso hay más personas que deciden poner un alto al tema. No veo que haya un rebrote en la venta de droga”, resaltó el jefe de Antinarcóticos.

ACCIDENTE Y MUERTE POR RIÑA ESTUDIANTIL

Desenlace fatal. La rivalidad entre alumnos de los colegios Vicente Rocafuerte y Aguirre Abad, en Guayaquil, dejó como resultado un infante fallecido. Esto sucedió la tarde del miércoles, cuando decenas de estudiantes de ambos planteles se enfrentaron a piedras en las cercanías de la piscina olímpica Alberto Vallarino, en las calles Antepara y Hurtado.

Según los vecinos, al ver la riña, un hombre que circulaba por el sector en su vehículo trató de evitar las piedras, por lo que, en lugar de detenerse en la señal de pare, avanzó y cruzó, pero en ese instante su auto fue impactado por un bus y se volcó. Resultado del impacto falleció un menor de 1 año y 6 meses, el conductor del vehículo huyó.

Mientras  que el conductor  del bus -quien tenía  derecho de vía (manejaba por la preferencial) fue detenido. Los jóvenes que se lanzaban piedras huyeron al ver la magnitud de la tragedia provocada, de manera indirecta, por su pelea callejera.

Los vecinos de esa zona céntrica de Guayaquil manifiestan que las peleas se dan -en ese sector- para “marcar su territorio”, en especial cuando se trata de las cercanías de colegios que antes eran solo femeninos, como por ejemplo el Rita Lecumberri, el Veintiocho de Mayo y el Guayaquil. En la zona del accidente del miércoles se encuentra el colegio Rita Lecumberri.

Además, no se conoce si el infante fallecido viajaba en un asiento infantil de seguridad y abrochado correctamente.