El proceso judicial  contra Roberto Eliut Campos Crespo, por  el asesinato de María Fernanda Fernández de Córdova Flores  (muerta a martillazos), quedó suspendido hasta que el implicado sea capturado o se entregue voluntariamente a la justicia. Así lo aclaró Gonzalo Merizalde Nicola, juez Primero de Garantías Penales del  Guayas, luego de llamar a juicio al principal implicado  y acoger el dictamen acusatorio presentado por el fiscal Oswaldo Vera, quien investiga el caso.

El magistrado llegó a esa conclusión luego de tres horas de   audiencia,  en las que las partes debían alegar sus fundamentos en el proceso.  “De aquí viene una tercera etapa en la que el procesado deberá comparecer ante algún tribunal penal, previo al sorteo correspondiente”, explicó el juez. No obstante, debido a que el implicado está prófugo se suspende esta etapa hasta que pueda rendir su versión.

Merizalde recalcó que la convocatoria a juicio será por el delito de asesinato y no por homicidio, como   pidió la defensa del acusado.

Julio César Cueva García, abogado  del procesado,    reveló   que   apelará la resolución del juez ante la Corte Constitucional.   “Aquí lo que hay es una pelea de enamorados que terminó mal y eso   en cualquier parte del mundo es homicidio”, dijo. 

García alegó que la joven asesinada  acosaba a Campos, por lo que calificó el hecho como un delito de dolo sentimental.  “Cuando lo capturen o se entregue, él  (Campos) dirá toda la verdad”.           

Esto lo sustentó al presentar correos electrónicos que revelaban la supuesta insistencia de María Fernanda para regresar con él luego de una separación.

Cueva presentó ante el juez una conversación  en la que ella presuntamente le escribió a Campos: “Yo soy  ahora la que te busco y no solo para un juego, sino para empezar desde cero”. La respuesta fue: “Todo tiene un límite en la vida, me cansé de ser tu juguete... solo serví para sacarte del aburrimiento...  solo fui una burla, un estúpido...”.          

Raúl Llerena, abogado de la familia Fernández de Córdova Flores, indicó que   no puede haber otro delito que no sea el de asesinato y  agravado. “Ninguna situación de orden doctrinario, para hacer creer a la opinión pública o la justicia que quien insinuó ser muerta sea la víctima, es aceptable y es realmente extraña al proceso penal”.

Aclaró que este delito prescribe a los 12 años y si no es capturado en ese tiempo hay el riesgo de que el caso quedé en la impunidad.

Campos podría enfrentar una pena de entre 16 y 25 años de reclusión en caso de hallarlo culpable.
Durante la audiencia, el juez ratificó la prisión preventiva contra el procesado, lo que deja vigente la boleta de captura en su contra. 

Campos, apodado a partir del crimen como el “Martillador”, está ubicado en el quinto puesto en la lista de los más buscados a nivel nacional, reveló Christian Flores Ruiz, tío de la víctima. La familia confirmó que hay una recompensa para quien ofrezca información que permita capturar al implicado.