Las ecuatorianas escalan peldaños en la Policía Nacional
Sus tres hijos y su esposo son la inspiración para salir adelante y alcanzar todas las metas que se propone la general inspector Tannya Gioconda Varela Coronel. “Ellos son mi vida y mi motor. Por ellos salgo adelante”.
Esa es la respuesta de la agente cuando se le pregunta quién la entusiasma para llegar tan lejos, de entre todas las mujeres que integran la Policía Nacional.
El pasado 13 de enero, María Paula Romo, ministra de Gobierno, entregó insignias de ascenso a Patricio Carrillo Rosero, como comandante General de la Policía; a la general Varela como jefe del Estado Mayor, y a Carlos Cabrera Ron, como inspector General.
La designación se cumplió según el Decreto Ejecutivo 973, suscrito el 10 de enero.
En el acto, la ministra Romo destacó el ascenso de Varela por ser una de las mujeres que más lejos ha llegado en el mando institucional.
En la actualidad hay 6.891 servidoras policiales a escala nacional. De ese número, 93 son oficiales superior; 649 son oficiales subalternos y 6.149 son clases y policías.
En 2018, María Fernanda Tamayo fue la primera mujer policía en alcanzar el grado de general inspector.
Más tarde, el mismo rango lo alcanzó Varela, quien reflexionó sobre el rol de las mujeres en la institución.
En declaraciones a Diario EL TELÉGRAFO, Varela reconoció que no ha sido un camino fácil, pero llegó a esa posición haciendo a un lado la idea de que las labores policiales son exclusivas para los hombres.
“No hay profesión solo para hombres. Ser general es un reconocimiento a una carrera construida con trabajo, con acciones positivas. Es el reconocimiento que hemos conseguido no por ser mujeres, sino porque nos lo merecemos”, reiteró.
La jefe del Estado Mayor admitió que muchas de sus actividades las cumple rodeada de compañeros en medio de un compromiso laboral. “Me siento cómoda trabajando en cualquier espacio que implique servir a la sociedad. Inmiscuir a las mujeres policías es una gran decisión porque los resultados están a la vista. Hoy por hoy el respeto que existe es porque también los oficiales han visto cómo hemos trabajado”, señaló.
Potencial comandante
Varela ha liderado importantes unidades de la Policía. Fue directora de Personal, comandante de la Zona 5; de la Subzona del Guayas.
También, directora Nacional de la Policía Especializada para Niños, Niñas y Adolescentes (Dinapen).
Uno de los cargos más trascendentales que ha desempeñado en su carrera fue cuando se convirtió en Comandante del Distrito Metropolitano de Guayaquil (DMG), al que ella denominó como “un territorio conflictivo”, pero que a pesar de todo sacó adelante importantes operativos.
En su nuevo rol, Varela indicó que se mantendrá bajo una línea de respeto. Trabajará con Carrillo y Cabrera -sus compañeros desde hace 36 años- bajo las políticas institucionales y del Estado.
El comandante Carrillo también está convencido de la fórmula en este mando institucional.
A su criterio, Varela se ha ganado su espacio en la institución porque ha cumplido con todos los requisitos.
“Tiene todas las condiciones, las capacidades, las habilidades, la experiencia y el conocimiento necesario para ejercer ese cargo”, señaló.
El comandante reiteró que en esa línea, la Jefe del Estado Mayor “es la primera opcionada para renovar al comandante General”.
Advirtió que el cargo no es un tema de género, sino de capacidades, porque ella figura como la primera en la siguiente terna.
“Una vez que termine el periodo de gobierno cambiarán el mando, o una vez que se cumpla el plazo, y Varela sería la primera opción”, dijo.
Una formadora estricta
El personal que la conoce da fe de su alcance profesional.
Esa es la impresión de la agente Marta Mena, quien presta servicios en el Comando General de la Policía en el Área de Contratación Pública.
Mena labora en el Portal de Compras Públicas, pero también ejerce funciones administrativas y operativas.
La servidora reconoció que en sus 33 años de servicio, trabajar con ella fue una experiencia enriquecedora.
Recordó que en 1987, la general Varela tenía el cargo de teniente y fue una “instructora maravillosa” y muy exigente.
“Ella nos formó a todos a viento y marea cumpliendo con lo que dice la ley. Nos educamos con una doctrina muy bien puesta, en una formación única”, recalcó.
La mayor Kestyn Celi Rodríguez, jefe de Ameripol, entidad adscrita a la Policía Judicial, no solo destacó la labor que cumplió Varela, sino también el resto de mujeres que se abrieron paso para que las siguientes compañeras escalaran rangos en la Policía.
“Es bueno que haya mujeres convencidas de llegar lejos y con ambición de comandar la Policía”, opinó. (I)