La Unidad Antisecuestro y Extorsión (Unase) de la Policía Nacional, liberó a 2 mujeres que fueron secuestradas por el denominado Consorcio de Justicia Indígena, en el cantón Cañar, provincia del mismo nombre.  Ellas fueron entregadas a sus familiares la noche del viernes.

La emoción fue evidente en los allegados de María Rosa G. y Rosa María A., quienes expresaron su agradecimiento a la Policía por el trabajo efectuado durante los días de encierro.

“Les debo la vida, pensamos que nos iban a matar si no entregábamos la plata y las tierras que nos pedían, fueron días muy difíciles encerradas en un cuarto, esperamos que estas actos terminen”, indicó María Rosa G.

El hecho se inició cuando el pasado 15 de noviembre, cuando la mujeres circulaban por la comuna Vende Leche, en Cañar, fueron secuestradas por varios sujetos que pertenecerían al llamado Consorcio de Justicia Indígena, quienes llevaron a las mujeres a una celda, con el fin de exigir a sus familiares que desistan de las denuncias en su contra, colocadas ante autoridades judiciales. 

Los integrantes de este consorcio exigían la cancelación de varias multas por un valor de $ 10 mil y la entrega de una parte de sus terrenos.

El ministerio del Interior informó sobre el operativo efectuado. El coronel Renán Velasco, jefe de la Subzona Cañar, indicó que la Policía Nacional investigó a los integrantes de este consorcio debido a una serie de irregularidades cometidas y denunciadas registradas en meses anteriores. 

“La primera mujer habría sido secuestrada porque heredó unos terrenos. Los integrantes del Consorcio no estaban de acuerdo con ello y decidieron que debían recibir parte de esta herencia, por lo que a la fuerza obligaron a la mujer a firmar documentos para la entrega de los bienes”, indicó Velasco. 

En el segundo caso, la mujer recibió dinero de un hijo que se encuentra en el exterior, para un tratamiento de su esposo. La situación no fue bien vista por la esposa del remitente, quien acudió al Consorcio para pedir su apoyo, lo que generó un litigio y exigieron dinero como una remediación. 

Según informó el Ministerio del lnterior, la información obtenida fue suficiente para que un equipo de la Unase llegara a la provincia e iniciara el trabajo de investigación hasta intervenir el lugar en el cual se encontraban retenidas las mujeres. Luego de varias reuniones y diálogos con los líderes se logró la liberación de las mismas.

“Respetamos la justicia indígena, pero no permitiremos que con pretexto de la misma se atropelle los derechos de las personas y sobre todo se atente contra la vida. Detrás de esto se está ocultando delitos como chantaje, extorsión y secuestro”, agregó Velasco. 

Para finalizar, Velasco señaló que se han emitido 11 boletas de captura en contra de integrantes de este Consorcio con fines investigativos, debido a que la reincidencia en este tipo de actos es permanente.

“En esta ocasión se ha llegado a un final feliz, las mujeres se encuentran en buen estado de salud y junto a sus seres queridos que es lo más importante. Ahora debemos trabajar para detener a estos sujetos que, aprovechándose de la justicia indígena, pretenden sacar beneficio a costa del daño a terceros”, concluyó Velasco. (I)