Docente de plantel, culpable de violar a niño de 11 años
El juicio seguido por el delito de violación en contra de un menor de 11 años llegó a su etapa condenatoria con una resolución en la que se declaró culpable al procesado. Así lo resolvió el Séptimo Tribunal de Garantías Penales del Guayas luego de la audiencia de juzgamiento realizada ayer contra Enrique Mite Rivas, director y docente de la Escuela 25 de Julio, del recinto El Rincón, parroquia Los Lojas, del cantón Daule.
Al inicio de la audiencia (10:07), la abogada Rosa Córdova, que patrocina a Mite Rivas, fue enfática en solicitar al juez Walter Avilés Guerra, presidente del organismo judicial, que -antes de toda comparecencia- resuelva el caso de caducidad de prisión preventiva que daría paso a la excarcelación de su defendido.
Su petición se basó en que se ha irrespetado el plazo constitucional relacionado con el tiempo máximo de prisión que puede estar una persona detenida sin ser juzgada. Alegó que en mayo pasado se cumplió el año sin ser juzgado y que era responsabilidad del titular del despacho dar paso a su solicitud.
Ante la insistencia de la abogada, Avilés le aclaró que el tema había sido resuelto con anterioridad por la Sala correspondiente y como ese es un ente superior, debía respetar dicho dictamen, por lo que no procedía su petición.
Aclarado el tema, se dio paso a la diligencia que contó con la intervención de los principales testigos en este caso, entre ellos la profesora del plantel que vio al niño sentado en las piernas del acusado, instantes en que se cometía el abuso.
La docente -quien pidió mantener su nombre en reserva- fue testigo clave en este caso. “El día jueves 28 de abril de 2011, siendo las 12:00, me acerque al aula de Enrique Mite Rivas... cuando ingresé al salón llegué hasta la mitad y vi al compañero sentado en la silla de su escritorio y al niño J. C. sentado en sus piernas con el pantalón abajo”, relató en su testimonio.
Prosiguió: “... el compañero cogió unas hojas inmediatamente y se tapó sus partes íntimas, pero igual ya me había dado cuenta que estaba con el cierre abajo, pero como que si no vi nada salí del salón aterrorizada... solo comuniqué a una de mis compañeras lo que vi”, relató.
Aseguró que no comentó nada a la familia o a la Policía porque era la “palabra mía contra la de él, pero el viernes 29 de abril interrogamos al niño y él nos confirmó lo que había visto, y en ese momento le comunicamos a la mamá del menor”. El sentenciado fue detenido el 2 de mayo de 2011.
El abogado de la víctima, Jaime Escudero, indicó que en días atrás la parte acusadora presentó un recurso de hábeas corpus para pedir la libertad del acusado basado en la caducidad de la prisión preventiva.
No obstante, aclaró que aún no hay un pronunciamiento de la Segunda Sala de lo Civil de Guayaquil debido a que “la parte acusada está obstruyendo la justicia”.
“Allá (en la Sala) se ha ordenado que se envíen oficios y no se han acercado”, aclaró el abogado. Aclaró que ese es un proceso distinto al que se realizó ayer en el Tribunal.